Cada primer domingo de mes, la Fundación Infante de Orleans (FIO) muestra en vuelo sobre los cielos de Madrid su magnífica colección de aeronaves clásicas, entre las que destaca un caza soviético Polikarpov I-16.
La FIO, que tiene sede en el madrileño aeropuerto de Cuatro Vientos, cuenta con uno de los 4 cazas Polikarpov I-16, que quedan en el mundo en estado de vuelo, del espectacular total de 10.292 (6.848 cazas y 3.444 entrenadores biplazas) construidos por la poderoso industria militar de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en los años treinta y principios de los cuarenta del pasado siglo.
El revolucionario Polikarpov I-16 fue el primer monoplano con ala de estructura cantilever y con tren de aterrizaje retráctil del mundo. También fue durante varios años, hasta 1941, fecha en la que la URSS entró a participar en la Segunda Guerra Mundial, tras la invasión alemana, la espina dorsal de la Fuerza Aérea Soviética. Aunque su fama a nivel mundial, comenzó 5 años antes, sobre los cielos de la ciudad de Madrid, capital de España, cuando los empezó a operar la Aviación de la II Republica española, en el marco de la Guerra Civil que asoló el país entre 1936 y 1939.
Como resalta la Fundación: “Fue tremendamente emblemático, que como “Mosca” voló con la República durante la Guerra Civil y como “Rata” en la posguerra en las filas del Ejército del Aire, el Polikarpov I-16, llámesele “Mosca” o “Rata”, lo hace ahora brillantemente con la FIO en la España de todos. Cuando en noviembre de aquel 36 las fuerzas nacionalistas llegaban a las puertas de Madrid, los aviones atacantes se vieron de pronto sorprendidos ante la presencia "de unos pequeños monoplanos pintados de gris, que parecían salir de las alcantarillas” e inmediatamente los atacaban, haciendo gala de una gran velocidad. Por esta razón, llamaron prontamente “Ratas” a los que, por otra parte, creían ser una versión con tren retráctil del Boeing americano”.
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El I-16 de la FIO, es uno de los 4 que tienen capacidad de vuelo en el mundo. (Foto Julio Maíz Gutiérrez)
Desde ese momento, hasta la derrota final del Gobierno del Frente Popular, el 1 de abril de 1939, hace ahora 85 años, los Polikarpov I-16 junto a los biplanos I-15 también suministrados por la dictadura de Stalin pagados por el oro sustraído en el Banco de España, fueron los principales cazas de los republicanos.
Desgraciadamente, los supervivientes al conflicto, que incorporó en 1939 el por entonces recién creado Ejército del Aire español, fueron desguazados según se iban siendo dando de bajas, los últimos ya en los años cincuenta del pasado siglo, tras la llegada del moderno material cedido/vendido por Estados Unidos, tras la firma en 1953 de los Pactos de Madrid entre los Gobiernos de Madrid y Washington.
Tendría que pasar más de medio siglo para poder ver volar un Polikarpov I-16 sobre los cielos de España, de la mano de la FIO, tras un difícil y complicado proceso de adquisición del hoy matriculado como EC-JRK, aunque está pintado con los colores, numeral y marcas del que pilotó el as republicano José Maria Bravo durante el conflicto.
En concreto, siempre según la FIO, este caza “fue descubierto en 1992 abandonado en Karelia, región del norte de Rusia fronteriza con Finlandia. El avión fue fabricado en 1937 y fue abandonado probablemente hacia 1942. Los restos fueron restaurados en Siberia por la Oficina de Investigación Aeronáutica de Novosibirsk, realizando su primer vuelo en noviembre de 1997. El avión fue enviado a Nueva Zelanda junto con otros ejemplares restaurados y finalmente adquirido por la FIO con fondos aportados por el ayuntamiento de Getafe (Madrid) y la propia Fundación”.
También se precisa, que “a su llegada a Cuatro Vientos en septiembre de 2005 fue pintado con el indicativo 249, precisamente el que lucía el avión de Bravo como jefe de la Tercera Escuadrilla de Moscas, y el famoso “Seis Doble” en el timón de cola. Desde entonces vuela habitualmente en las exhibiciones de la FIO como auténtico avión estrella de la colección.” (Julio Maíz)
