El presidente de TEDAE, Adolfo Menéndez, ha presentado la Guía Estratégica 2015-2025 del Sector Aeronáutico a un nutrido grupo de representantes de las principales empresas aeronáuticas españolas, de instituciones vinculadas al sector y de la Administración. El acto, al que han asistido la Secretaria General de Industria y de la PYME, Begoña Cristeto, y el Director General del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial, Francisco Marín, ha tenido lugar en la Real Academia de Ingeniería.
TEDAE identifica los principales retos que la industria aeronáutica, cuya contribución al PIB industrial español es del 4,5%, tiene que abordar en los próximos años para consolidar con éxito su crecimiento y su competitividad; así como los objetivos que quiere alcanzar en el periodo de tiempo contemplado, con propuestas concretas y un plan de actuación. Los objetivos que identifica la Guía Estratégica 2015-2025 del Sector Aeronáutico son duplicar la facturación hasta alcanzar el 1% del PIB en 2025, impulsar la coordinación de los actores públicos con competencias en el ámbito aeronáutico, identificar las principales tecnologías de las que dispone la industria española, consolidar las exportaciones, fortalecer el tejido industrial, incrementar el empleo cualificado y la atracción de talento, igualar la productividad de la industria española con la europea, ayudar a mejorar la competitividad de los procesos de producción, así como también al desarrollo de áreas tecnológicas para ser tenidos en cuenta en los futuros programas aeronáuticos.
El Plan de actuación concreta ayudas a la tecnología y al desarrollo de programas, ayudas a la competitividad de los procesos de producción, a la formación y a la inversión en respuesta medioambiental. Las características del sector aeronáutico -con productos de ciclo de vida largo -30/40 años, desarrollos tecnológicos que exigen inversiones altísimas con retornos a muy largo plazo, que necesitan empresas tractoras fuertes y personal altamente preparado-, hacen necesaria una política tecnológica e industrial que garantice la continuidad y la estabilidad para poder mantener los elevados niveles de competitividad que exige el mercado mundial.
España es de los pocos países con capacidad para llevar a cabo el ciclo completo de una aeronave (diseño, fabricación, certificación y mantenimiento). Como hacen los países punteros con industrias aeronáuticas competitivas, el sector necesita también en España reforzar el apoyo de las instituciones públicas y disponer de herramientas similares a las que tienen esos países para competir en igualdad de condiciones y mantener nuestro liderazgo como potencia mundial en el ámbito aeronáutico.
La Guía señala también la conveniencia de poner en marcha un nuevo esquema de gestión, que mejore la coordinación de los agentes intervinientes, para asegurar la eficiencia de los recursos destinados al sector. Para avanzar en ese un nuevo esquema de gestión se crea un foro integrado por representantes de los ministerios de Industria, Energía y Turismo y de Economía y Competitividad, de otros departamentos gubernamentales con responsabilidades aeronáuticas, así como también de la industria. Un foro de alto nivel cuya misión principal sería elaborar la estrategia nacional y la discusión de todos los elementos que afectan a la competitividad del sector aeronáutico, así como también la coordinación de las iniciativas que se realicen en todo el territorio nacional en cuanto al desarrollo de productos o I+D+i. Y todo ello en aras de disponer en el futuro de más capacidades tecnológicas y de una cadena de valor más eficiente, para lo que se requiere una estrategia global actuando en local.