Turquía está negociando con Ucrania y Rusia la vuelta de dos aviones de transporte A400M de su Fuerza Aérea que han quedado atrapados en el aeropuerto de Borispol, en Kiev, en medio de la guerra.
Los aviones de transporte Airbus Military & Space A400M pertenecientes a la Fuerza Aérea de Turquía llegaban al aeropuerto ucraniano de Borispol el 24 de febrero, muy pocas horas antes del inicio de la invasión de Rusia. Ambos despegaron desde la base aérea turca de Eskişehir y fueron enviados para la evacuación de ciudadanos turcos, incluidos sus diplomáticos, ante lo que ya era una guerra inminente.
Poco después de que los A400M turcos aterrizaran comenzó el bombardeo ruso que dejó el aeropuerto inutilizable, a lo que se sumaba el posterior cierre del espacio aéreo ucraniano. A pesar de los daños en la instalación, los pilotos de la Fuerza Aérea de Turquía intentaron rodar y despegar utilizando las zonas menos dañadas de las rodaduras y la pista, lo que finalmente no fue posible. Poco después, las tripulaciones de los A400M, se refugiaban en la embajada turca en Ucrania.
Desde el primer momento el Ministerio de Relaciones Exteriores turco mantuvo conversaciones con sus homólogos de Moscú, con el primer objetivo de evitar que un ataque de aviones de combate o misiles de crucero rusos destruyesen sus aeronaves, que según medios turcos tienen un valor unitario de unos 110 millones de euros.
Posteriormente, el ministro de Defensa turco, Hulusi Akar, ha iniciado conversaciones con los de Ucrania y Rusia, Alexey Reznikov y Sergey Shoigu respectivamente, para coordinar la salida de los A400M de Borispol, según se informó el pasado 5 de marzo. La Fuerza Aérea de Turquía cuenta con 9 aviones de transporte A400M, estando actualmente a la espera de un décimo aparato, el de número de construcción 118 que se espera que sea entregado esta misma primavera tras efectuar el vuelo de entrega desde la planta de Airbus en San Pablo (Sevilla). (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Uno de los A400M de la Fuerza Aérea de Turquía. (foto Julio Maíz/defensa.com)