El que será el primer avión de combate F-35A de la Fuerza Aérea de Polonia está en fase final de montaje en la planta de la Lockheed Martin de Fort Worth, Texas. Desde esa factoría llegan las imágenes, algunas de ellas parcialmente pixeladas por seguridad industrial, del primer F-35A producido para la Fuerza Aérea de Polonia, que se dotará de 32 de estos aparatos que serán la punta de lanza de su aviación de combate en un momento crucial.
Las fotos de este primer aparato, que lleva la designación AZ-01, le muestran en la línea de producción ya con tren de aterrizaje, lo que facilita su paso por las diferentes estaciones de trabajo de la planta, que tiene más de un kilómetro de longitud.
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La designación local de” husarz” del F-35. recuerda a los húsares alados polacos. (foto Julio Maíz)
Los medios polacos resaltan este hito en el primer avión F-35A, que a principios de abril fue levantado utilizando una grúa pórtico desde la estación de ensamblaje electrónico, donde las secciones delantera y trasera del fuselaje han sido unidas a la parte central, que incorpora ya las alas. El cazabombardero entrará ahora en la fase de montaje final, durante la cual se añadirán las superficies de control y otros sistemas, para finalmente instalarle el motor y, una vez acabado, sacarlo al exterior en el denominado roll-out.
Este primer avión está previsto que se entregue a la Fuerza Aérea de Polonia a finales de este año. Aunque, como la mayoría de los operadores extranjeros del F-35, no volará directamente a Polonia, sino hasta la base aérea de la Guardia Nacional Aérea o Air National Guard (ANG) de Arkansas, donde se llevará a cabo el entrenamiento inicial de los pilotos polacos. En esta instalación se entrenarán también posteriormente los pilotos de F-35A de Alemania, Finlandia, Singapur y Suiza. La llegada de estos primeros aviones de combate a Polonia se espera para 2026.
El programa polaco prevé la adquisición total de 32 cazas F-35A, con entregas previstas entre 2024 y 2030, mediante un desembolso de 4.600 millones de dólares (4.310,4 millones de euros), además del apoyo logístico inicial, entrenamiento.
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Otra imagen del primer F-35 polaco en fase de fabricación en Fort Worth. (foto Lockheed Martin)
“Estos nuevos aviones de combate serán los primeros de la Fuerza Aérea de Polonia que no porten la tradicional insignia del tablero de ajedrez de cuadros blancos y rojos", afirmó el general Wiesław Kukuła, Jefe del Estado Mayor de la Defensa de las Fuerzas Armadas de Polonia. Será reemplazada por una versión gris de baja visibilidad, lo que hará más difícil que puedan ser detectados por los aviones del enemigo
Los polacos denominarán a su F-35A, tras una petición de propuestas de nombres a través de las redes sociales, y la decisión final del Ministerio de Defensa Nacional de Polonia, como husarz o húsar en español. El apelativo recuerda a los miembros de la caballería pesada polaca del siglo XVII denominados como Húsares Alados, dado que decoraban sus armaduras con penachos de plumas, como se ve en la imagen adjunta tomada en el museo militar de Varsovia. (Julio Maíz)
