Así se denomina las operaciones de reabastecimiento en las que se trasvasa combustible, en contraposición a los “contactos secos”, que son operaciones de entrenamiento en las que se realiza la maniobra de enganche entre los aviones pero no se transfiere combustible.
Para estas operaciones se emplea un avión de reabastecimiento A330 MRTT británico, del consorcio Air Tanker, con la unidad de reabastecimiento instalada en el fuselaje (Fuselage Refuelling Unit o FRU).
La capacidad para recibir combustible en vuelo aumenta el radio de las misiones del avión de transporte A400M, permitiéndole realizar despliegues de largo alcance sin necesidad de realizar paradas.
Estas pruebas siguen a las de mayo, en las que fue un A400M el que se empleó por primera vez como avión de reabastecimiento, suministrando combustible a un avión de combate F-18 del Ejército del Aire español.
El A400M puede actuar como avión de reabastecimiento además de transporte, ya que puede recibir en su interior un depósito de combustible y en sus alas unos contenedores o pods con sondas de reabastecimiento del tipo cesta y otra sonda central en el fuselaje. Una característica única del A400M en este sentido es que puede reabastecer a aviones y a helicópteros ya que puede mantener sin problemas la velocidad alta que requieren los primeros y la baja de los segundos. (J.N.G.)
