Un comando de civiles armados robó dos tractocamiones de una empresa fabricante de municiones y se hizo con 7.114. 500 cartuchos útiles de diversos calibres que eran transportadas desde el centro del país hacia el sur de los Estados Unidos. El cargamento robado está compuesto por 14 tipos de municiones, casi todas para arma corta, pero también hay miles de cartuchos para fusiles automáticos ligeros (FAL) calibre 7.62 x 51 milímetros, cartuchos para escopeta y para otro tipo de armas de fuego.
La Fiscalía General de la República (FGR) inició la investigación del caso y pidió ayuda de las fuerzas armadas –Ejército, Fuerza Aérea, Marina y Guardia Nacional– para localizar el cargamento robado por un grupo de la delincuencia organizada, en un hecho inédito en el abanico de acciones criminales relacionadas con el robo de armas de fuego en México.
Esto ocurrió el pasado martes nueve de junio, cuando dos unidades de la empresa Industrias Tecnos fueron interceptadas por un grupo de civiles fuertemente armados cuando llegaban al municipio de San Luis de la Paz, en la confluencia de los estados de San Luis Potosí y Guanajuato.
Fu en el municipio de San Luis de la Paz, en Guanajuato, en donde el comando de civiles detuvo sobre la carretera federal 57 a los escoltas y a los conductores de los dos tractocamiones para despojarlos de sus unidades y llevarlos a otro punto de la zona, desconectando previamente los sistemas de geolocalización de los vehículos.
La empresa fabricante y exportadora dio aviso a las autoridades federales y estatales, alertándolas sobre la desaparición de los tractocamiones y de los escoltas asignados a protegerlos. El robo ocurrió alrededor de las 10 de la mañana del martes 9 de junio. Tropas del Ejército Mexicano y de la Guardia Nacional recorrieron la zona y localizaron a los custodios y a los dos tractocamiones, pero sin las cajas secas que contenían los más de 7 millones de cartuchos de exportación.
La Fiscalía General de la República inició, con carácter de “Extraurgente y prioritario” una carpeta de investigación en torno al robo y emitió el Oficio DE/2463021, fechado el 09 de junio en la delegación de la fiscalía en León, Guanajuato, señalando en dos cuartillas los datos principales sobre el hecho, y detalla el número de cartuchos y su calibre, indicando que se trata de un embarque integrado por 7.114. 500 municiones útiles.
El material robado comprende municiones de 14 calibres diferentes, casi todas para armas cortas, destacando 87 mil piezas calibre 7.62 x 51 milímetros, usado para abastecer armas largas.
La FGR señala en su documento el material robado está integrado por:
2.352.000 cartuchos calibre .22 LR alta velocidad
1.570.000 cartuchos calibre .22 LR alta velocidad
1.230.000 cartuchos calibre .22 LR alta velocidad PH
590.000 cartuchos calibre .22 LR alta velocidad
360.000 cartuchos calibre .22 LR alta velocidad
295.000 cartuchos calibre .40 S&W
215.000 cartuchos calibre .22 LR súper colibrí
117.000 cartuchos calibre .45 automático
100.000 cartuchos calibre .38 especial encamisado
99.000 cartuchos calibre .410 alta velocidad M.71/2
87.000 cartuchos calibre 7.62 x 51 mm 150 GN
71.500 cartuchos calibre .12 minishell posta
25.000 cartuchos calibre .38 súper auto +P
3.000 cartuchos calibre .12 minishell sluhg
En el documento, la fiscalía detalla que son dos los vehículos que sufrieron el robo de los cartuchos; dos tractocamiones “Semiremolque, tipo Caja Seca, color blanco, Marca Altamirano, Modelo RCS2E402009, año 2009, Placas 2MY050A Particulares de Morelos, Serie 3C9CS40229A003391, cargado con cartuchos”. El otro vehículo es un “Semiremolque, tipo Caja Seca, color blanco, Marca Fruehauf, Modelo, Año 2015, Placas 1MY150A, Serie 3AWV24824FX142001, cargado con cartuchos”.
En el texto, el encargado del despacho de la Delegación de la Fiscalía General de la República en el Estado de Guanajuato, David Eugenio Carmona Álvarez, solicita el apoyo “a quien corresponda” para que la “célula” de la FGR en ese estado avance en el inicio de la investigación de robo de los 7 millones de cartuchos. El texto de la FGR fue elaborado cuando aún no se conocía el paradero de los tractocamiones y sus cajas conteniendo el “material bélico”, como los clasificó la fiscalía. En esta primera notificación de lo ocurrido, la fiscalía solicitaba el apoyo de diversas instituciones para difundir fotos y cartelones de las cajas secas y los tractocamiones.
Diversos medios del estado de Guanajuato consignaron más tarde que los trailers fueron localizados en un paraje entre San Luis de la Paz y Cabaña del Rey, pero las cajas secas estaban vacías. Las primeras notas al respecto señalaban primero, de manera confusa, que los cartuchos pertenecían a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y que los cartuchos eran material que la secretaría exportaba hacia los Estados Unidos.
La SEDENA precisó que esto no era asi; indicó que las municiones no eran suyas, no las habían hecho en su Fábrica de Cartuchos. Lo que sí confirmaba era el robo del material. Luego hubo versiones señalando que el material se lo habían robado a la Guardia Nacional, lo cual también resultó falso.
El robo de los 7 millones de cartuchos útiles se realizó en uno de los estados de la república mexicana controlado por el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), la organización del narcotráfico más violenta y que desde hace casi 10 años ha retado constantemente al Estado Mexicano.
El 1° de mayo de 2015, el Ejército Mexicano y la Policía Federal lanzaron una operación para detener a Rubén Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, líder del CJNG. La operación se efectuó el municipio de Casimiro Castillo, en donde se ocultaba El Mencho con decenas de sicarios y escoltas. Tres helicópteros militares y uno de la Policía Federal intentaron desembarcar tropas en la zona, pero fueron atacados desde tierra con lanzacohetes RPG y fusiles Barret y Browning calibre .50 milímetros, derribando a un Cougar de la FAM.
Nueve militares y un policía federal murieron calcinados en el lugar. El Mencho y su gente escaparon en lo que hasta la fecha ha sido la mayor agresión para militar de un grupo criminal contra las fuerzas armadas mexicanas. (Jorge Alejandro Medellín)