Desde la llegada de los primeros SH60-F en 2020, la Quinta Escuadrilla de la Flotilla de Aeronaves ha ido despidiéndose paulatinamente de sus helicópteros Sikorsky SH-3D Sea King, conocidos popularmente en la Armada como Morsa. El 22 de junio, en las maniobras FLOTEX 22 y frente a la playa del Campo de Adiestramiento Sierra del Retín, se asistió a la última toma de uno de ellos en la cubierta del “Juan Carlos I”.
Hoy, la Quinta Escuadrilla despedirá en la Base Naval de Rota a sus dos últimos helicópteros SH-3D Sea King. La ceremonia la presidirá el Almirante de la Flota y participarán antiguos jefes y dotaciones de la Escuadrilla.
La Quinta Escuadrilla fue creada en febrero de 1966 con el objeto de hacer frente a las amenazas submarinas, principal función de estos helicópteros, con una dotación inicial de 94 hombres. Desde entonces hasta hoy han ostentado su jefatura veintiocho oficiales y han servido en sus filas varios cientos de oficiales, suboficiales y personal de marinería. La Escuadrilla, que celebró en abril de 2013 sus primeras 100.000 horas de vuelo, incorporó en septiembre de 2020 los dos SH60-F iniciales, la primera pareja de un total de ocho que constituyen el relevo generacional del SH-3D Sea King.
Morsa 501 versión antisubmarina
El 29 de junio de 1966 llega a bordo del USS "Independence” el que sería denominado "Morsa 501", el primer SH-3D en su versión antisubmarina, prototipo de todos los que han volado con esa versión. En total se incorporaron, desde 1966 hasta 1981, dieciocho unidades, siendo la última de ellas la que cerró la cadena de montaje de este modelo.
La Armada Española decidió introducir equipos de alerta aérea temprana AEW (Airborne Early Warning) que protegiesen al Grupo de Combate. Se adquirieron cuatro sistemas, montándose tres en helicópteros modificados y el cuarto en un contenedor utilizado como banco de pruebas y simulador. El 14 de mayo de 1987 se completó la transformación del "Morsa 509" a la versión AEW, lo que dotó a la Armada de la importante capacidad de alerta temprana gracias al radar "SEARCHWATER" instalado en lo que, cariñosamente, en la Armada se llamaban “paqueteras”, debido a su color gris, dado que en aquella época las "MORSAS" aún lucían su color azul original.
Transformación para asalto anfibio
En 2001, tras el cambio de escenario geoestratégico a la desaparición del Pacto de Varsovia, se inició un plan de modernización para adaptar los helicópteros a las misiones de transporte táctico de tropas. Se inició así la transición de la misión de guerra antisubmarina a un nuevo tipo de misión, el asalto anfibio, para la que el helicóptero multiplicó sus capacidades. En 2002 finalizó su conversión el "Morsa 514" cerrando el ciclo antisubmarino y la Quinta Escuadrilla pasó a tener como misión principal el helitransporte anfibio, contando para ello con 7 helicópteros.
A partir de ese momento, la Quinta Escuadrilla emprende un nuevo camino dotando a la Armada de nuevas capacidades que permiten el despliegue de los SH-3D Sea King en distintas misiones internacionales. La Escuadrilla tuvo presencia en las Operaciones “Libertad Duradera” en Afganistán; en Irak; UNIFIL, en Líbano; ALTHEA, en Bosnia-Herzegovina; HISPANIOLA de ayuda a Haití; y ATALANTA, en el Océano Índico; participando en hechos tan destacables como, en 2002, el asalto al buque norcoreano So San, operación que recibió el nombre de Operación "Socotora", en el marco de la Operación "Libertad Duradera".
También es destacable la participación de un helicóptero de la Quinta Escuadrilla en el rescate de la ciudadana francesa Evelyne Colombo, secuestrada por piratas somalíes en aguas del Océano Índico, convirtiéndose en actor de la primera operación de rescate, HRO por sus siglas en inglés, de la Armada y también de la Operación Atalanta en su conjunto.