Dos formaciones de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos compuestas por el más sofisticado avión de combate del mundo, el Lockheed Martin F-22A Raptor, han utilizado la Base Aérea de Morón (Sevilla) como punto de escala entres sus bases en Estados Unidos y el Golfo Pérsico. La rotación comenzaba la tarde del 26 de marzo, cuando llegaban a la instalación del Ejército del Aire español seis de estos cazabombarderos de 5ª generación de la Fuerza Aérea de Estados Unidos o USAF (United States Air Force).
Los Raptor, asignados al 1st FW (Fighter Wing/Ala de caza), que venían procedentes de Langley AFB (Air Force Base, Virginia), realizaban el salto del Océano Atlántico de forma directa gracias al apoyo de varios aparatos de reabastecimiento en vuelo Boeing KC-135R Stratotanker y KC-10 Extender, que salieron con ellos desde la Costa Este de Estados Unidos. A éstos tanker se les sumaba otro KC-10 previamente destacado en la Base Aérea de Lajes (Azores-Portugal). Este tipo de formación es muy similar a la que llegaba a FIDAE el pasado 30 de marzo, como ya informó defensa.com.
Tras llegar a Morón los cazas, que llevan en la cola las siglas FF, aterrizaban inmediatamente detrás dos KC-135, uno del 126th ARW (Air Refueling Wing) que forma parte de la ANG (Air National Guard) de Illinois y el otro del 171st ARW de la ANG de Pennsylvania. Cerraba la formación un KC-10A del 60th AMW (Air Mobility Wing), unidad que tiene sede en Travis AFB (California).
Dos días después la formación de F-22, el más poderoso aparato de superioridad aérea de los Estados Unidos, y los aviones cisternas realizaban la segunda parte del largo viaje que les llevó a la Base Aérea de Al-Dhafra (Emiratos Árabes Unidos), habiendo dado así media vuelta al mundo.
La presencia de los F-22A en este escenario se fraguó en 2014, cuando comenzó la operación “Inherent Resolve”, que lucha contra los terroristas islámicos del Daesh en Irak y Siria. Aquel otoño se basó un destacamento de Raptor en Al-Dhafra, que se ha vuelto permanente mediante rotaciones semestrales. Los más caros cazabombarderos de la USAF han protagonizado tanto acciones de bombardeo contra los terroristas, como misiones de superioridad aérea, misión que se volvió más importante tras la importante presencia rusa en Siria.
Volviendo al actual relevo, coincidiendo con el Domingo de Pascua, el 1 de abril, llegaba a Morón otra formación de seis F-22A, en este caso, como denotaban las sigla TY de sus colas, pertenecientes al 325 FW que tiene sede en Tyndall AFB, en las cercanías de Panama City (Florida). Se trataba de los aparatos relevados en Al-Dhafra tras la llegada de los del 1 FW procedentes de Travis, que igualmente venían a la base andaluza acompañados de cuatro tanqueros.
La Base Aérea de Morón, instalación aeronáutica de utilización conjunta entre España y los Estados Unidos, cuenta entre otras fuerzas con la presencia del 496th ABS (Air Base Squadron) de la USAF, que proporciona todo tipo de servicios, como los de combustible a las aeronaves y tripulaciones que pasan por Morón.
Este relevo pone de manifiesto de nuevo el papel primordial que tiene esta base para los despliegues y repliegues de aeronaves a los escenarios de Irak y Siria.(Julio Maíz Sanz)
Fotografías:
·Momento del aterrizaje de un F-22A “Raptor” en Morón, como se puede ver en el depósito de agua. Foto: Julio Maíz/defensa.com.
·De frente es donde mejor muestra el F-22 su configuración “Stealth”. Foto: Julio Maíz/defensa.com.