Un comunicado de las Fuerzas Armadas informó que la Fuerza Naval Hondureña (FNH) había capturado una nave pesquera de 14 metros de eslora y con tres motores fuera de borda, a casi 4 km de la costa del departamento caribeño hondureño Gracias a Dios. La embarcación, tripulada por 2 hondureños y 4 colombianos, cargaba 79 fardos de cocaína con un peso total de dos toneladas. Los detenidos y el cargamento fueron transportados en una avioneta hacia la base de la Fuerza Aérea Hondureña en Toncontín, al sur de Tegucigalpa.
Casi cinco toneladas de cocaína han sido decomisadas por las autoridades hondureñas desde enero hasta el 1 diciembre, a lo que se suman las dos recién capturadas.
La efectividad de la Fuerza Naval Hondureña se ha visto afectada por la falta de disponibilidad de las dos patrulleras SPa-4207 (FNH-1401 Lempira y FNH-1402 Morazán), pues, estas embarcaciones no pertenecen al Estado hondureño, son arrendadas por medio de un controvertido contrato con opción de compra establecido por la intermediaria Servicios Marítimos Internacionales SA de CV.
Como parte del contrato, la intermediaria debía establecer instalaciones “certificadas” para atender el mantenimiento y la acomodación de las naves. Estas nunca fueron establecidas, por lo que las naves deben permanecer en puerto hasta que un técnico de la Damen verifique y certifique cualquier reparación.
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La misma dificultad se encontraría cuando se adquirieron los sistemas de cañón estabilizado Rafael Typhoon y los sistemas estabilizados Mini-Typhoon para armarlas. Las naves carecen del “punto duro” receptor en la cubierta en posición B (frente el puente), o de un adaptador en posición A (proa) para colocarles dichos módulos, y estos no pueden ser instalados sin la aprobación del “verdadero” dueño, que es Damen Shipyard. Esta situación podrá ser superada próximamente, pues en 2023 caduca el contrato de arrendamiento, por lo que los dos navíos se pondrán a opción de compra por la Damen y el Estado hondureño podrá adquirir los derechos de ambos.
Desde 2017 se han detectado sembradíos de coca en lo más remoto de la Mosquitia, desde entonces se han destruido 23 laboratorios y 13 pistas de aterrizaje. Para asistir en esta lucha, las Fuerzas Armadas de Honduras buscan invertir unos $27 millones en la restauración de seis aviones A/T-27 Tucano.
También se anunciaba hace varios meses una inversión de $33 millones para la restauración a vuelo de dos Bell 412 y la adquisición de hasta seis nuevos helicópteros. Se ha anunciado que los primeros dos aparatos tendrán un costo de $25 millones de USD, por lo que se cree que se ha optado por la adquisición de dos Bell 412, a un coste de $12,5 millones de USD cada uno, que se cubrirán con el presupuesto de Defensa.
En el 2022 se aprobó un presupuesto para las FFAAH de 9.336.149.156 lempiras ($378.569.551 USD), y se han solicitado 10.662.758.329 lempiras (o $432.361.948 USD). (Julio Montes)
