Tal como ya adelantamos, la Armada de Chile, a través de la empresa Astilleros y Maestranzas de la Armada (ASMAR) se encontraba abocada a la selección de un diseño a construir en su planta del puerto de Talcahuano, con el fin de reemplazar al transporte Aquiles, dos barcazas del tipo “Batral” de origen francés y al LSDH 91 “Sargento Aldea”, también de origen francés. Este programa de construcción naval es el paso anterior al gran desafío que se ha planteado Chile: construir sus propias unidades de combate en astilleros nacionales.
Aunque no se ha dado a conocer aún todos los detalles, hemos podido saber que el diseño elegido correspondería a un VARD 7, presentado por la empresa del mismo nombre, propiedad del grupo Fincantieri y con presencia en Ottawa y Vancouver en Canadá; Houston, en el estado de Texas en Estados Unidos y en Vũng Tàu, Vietnam. La línea VARD 7 denominada “Naval and Security” incluye una gran variedad de diseños en el ámbito de las unidades tipo OPV, transporte de personal y material y dos diseños con capacidad de operar en aguas polares. Su diseño más pequeño es el VARD 7-040 de 40 metros de eslora y casco de aluminio. Los diseños de VARD actualmente en operación son dos unidades VARD 7-080 “Roisin Class” de la República de Irlanda; dos del diseño VARD 7-085 en Nueva Zelanda; cuatro unidades VARD 7-090 “Samuel Beckett” también en Irlanda y el transporte “Aquiles” de la Armada de Chile, que corresponde al modelo VARD 7-310.
De acuerdo con las características generales de las unidades que se desean reemplazar, podemos suponer que la propuesta de VARD corresponde a los modelos VARD 7-312 o VARD 7-313. El primero de 125 metros de eslora y el segundo de 130 metros. Ambos diseños se pueden calificar como unidades logísticas multipropósito con capacidad para operar helicópteros, patrullar la ZEE y prestar asistencia humanitaria además de proporcionar capacidades de transporte de personal y carga. Una diferencia que salta a la vista entre ambos y que puede ser interesante para Chile dado sus intereses antárticos, está dada por la calificación del VARD 7-312 para operar en aguas antárticas en la categoría PC 7, es decir, puede navegar en verano u otoño en hielo delgado del primer año que puede incluir trozos de hielo viejo.
Actualmente el proyecto se encuentra en la fase de definición de las diferentes características y equipos específicos que darán satisfacción a las necesidades específicas de Chile. Si todo marcha bien, la construcción debería comenzar a fines del presente año. (Roberto Sandoval Santana, corresponsal de Grupo Edefa en Chile)
Fotografías: Impresión artística del diseño VARD 7-313