No es habitual ver fuera del ámbito de Latinoamérica aviones de transporte de medio alcance Fokker F-28 Fellowship de la Fuerza Aérea de Colombia (FAC), como el que el pasado 30 de noviembre hacía la escala, camino de los Países Bajos, en el aeropuerto español de Gran Canaria.
El Fokker F-28-300 Fellowship matriculado FAC 1041, venía de la base aérea de El Dorado (Bogotá), donde tiene sede el Grupo de Vuelos Especiales N°82, que dependiente del Comando Aéreo de Transporte Militar, (CATAM), asegura el transporte VIP de los altos cargos del Gobierno de Colombia. Esta aeronave salió el pasado lunes, 29 de noviembre, de El Dorado, camino del aeropuerto brasileño de Manaus, siguiendo un largo viaje transcontinental con escalas en Fortaleza, Brasil, en el aeropuerto de Praia (Cabo Verde), y desde allí a Canarias.
En total el Gobierno de Colombia adquirió dos de estos aparatos a la empresa holandesa Fokker, primero uno de la serie 1000 en 1970, el matriculado FAC 002, que hasta el año 2005 fue el avión presidencial de Colombia, pasando entonces a tareas secundarias, siempre encuadrado en la citada Unidad VIP. Una década después se compró a la firma holandesa el FAC 1041, de la versión 3000, que aunque de igual longitud de fuselaje, 27,4 metros, tiene los planos mayores de 25,7 metros de superficie, frente 23,6 metros de la versión 1000.
Tras hacer escala en Canarias, la aeronave continuaba su largo periplo, el 1 de diciembre, hasta el aeropuerto de Burdeos-Mérignac, última escala antes de llegar a la base aérea de Woensdrecht. En esta instalación militar de la Real Fuerza Aérea de los Países Bajos, se ubica Fokker Techniek, especializada en tareas de mantenimiento, reparaciones y modernización o Maintenance, Repair, and Overhaul (MRO), por lo que la aeronave de la FAC se habría desplazado hasta Holanda, muy probablemente para ser sometido a un proceso de mantenimiento mayor en dicha instalación. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: El Fokker F-28 matricula FAC 1041 aterrizando en el aeropuerto de Gran Canarias, al fondo se ven los refugios acorazados del Ejército del Aire español. (foto Antonio Rodriguez Santana)