El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, emitió el pasado viernes un comunicado lamentando las declaraciones del Primer Ministro, Aníbal Torres Vásquez, quien días atrás criticó a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional del Perú, en un poco afortunado intento de defender las rondas campesinas, tras la polémica desatada por el secuestro de periodistas del Programa “Cuarto Poder” en Cajamarca.
Torres Vásquez manifestó, en relación a las rondas campesinas “que combatieron el delito real y efectivamente, desapareció al abigeato, el robo, los delitos contra el patrimonio en general, la violencia contra la mujer”, agregando que “ya quisiéramos que nuestras fuerzas policiales y nuestras Fuerzas Armadas brindaran la misma seguridad a todo el país”.
En el documento, el Comando Conjunto de la Fuerzas Armadas indica que “lamentamos profundamente estas declaraciones, que desvirtúan la abnegada labor que desempeñan nuestros integrantes al servicio de la Nación” y que el artículo N° 165 de la Constitución Política del Perú, señala que “la finalidad primordial de las Fuerzas Armadas es garantizar la independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República. Asumen el control del orden interno de conformidad con el artículo 137 de la Constitución¨.
Mas adelante, indica que “las Fuerzas Armadas son instituciones tutelares del Estado, constituidas por hombres y mujeres que visten el uniforme de la Patria, se encuentran desplegadas en nuestro territorio nacional velando por la defensa, el resguardo de nuestras fronteras, luchando contra los remanentes terroristas y el narcotráfico, trabajando muy duro en beneficio de nuestra población, en forma integrada con la Policía Nacional, para cumplir con la misión de recuperar la paz y el orden en las zonas declaradas en estado de emergencia”. Finalmente, se indica que “las Fuerzas Armadas del Perú, dignos herederos de la gloria de Bolognesi, Grau y Quiñones, mantenemos siempre elevada nuestra moral y reiteramos nuestro compromiso de honor con la seguridad y el desarrollo de nuestro amado PERÚ”.
Al mismo tiempo, la Asociación de Oficiales Generales y Almirantes del Perú (ADOGEN) emitió un pronunciamiento rechazando y condenando con máxima energía los comentarios del Primer Ministro, Aníbal Torres Vásquez, exigiéndole que se rectifique, e instando a los Ministros de Defensa e Interior a pronunciarse como corresponde, en defensa de las instituciones de su sector, además de solicitarle al Presidente de la República disponer el desagravio correspondiente y al Congreso de la República a realizar el control político que le corresponde.
En el documento, la ADOGEN es firme al señalar que las rondas campesinas en Cajamarca cometieron un “clásico acto de terrorismo” al secuestrar a periodistas de un programa dominical televisivo, quienes habían realizado un reportaje sobre un posible acto de corrupción en el entorno del Presidente de la República, privándolos de libertad y poniendo en peligro su integridad personal, además, obligándolos a rectificar, falsamente, y emitir un manifiesto sobre la información realizada dentro de su trabajo periodístico, ambas acciones constituyen “delitos flagrantes”, que deben ser perseguidos y condenados. Por último, entre otros aspectos, indica que el Primer Ministro falta a la verdad intencionalmente, ocultando el delito de los ronderos, pronunciando frases de contenidos claramente ofensivos a las Instituciones del Estado, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, denigrando su función y responsabilidad constitucional, lo cual es inaceptable.
