La planta desalinizadora fabricada en Texas que estaba previsto embarcar en un KC 130H de la Fuerza Aérea Uruguaya, excedía en 15 cm el ancho de la cabina de la aeronave. En un primer momento se anunció optar por la via marítima, lo que parecía riesgoso por los tiempos, a la vista de la intensa sequía y posibilidad de desabastecimiento de água en el sur de Uruguay .
Sin embargo, se supo en las últimas horas que el ministro de Defensa uruguayo, el Dr. Javier García, habría decidido solicitar cotización oficial a la USAF por el posible uso de un Boeing C17 para esa misión, descartando en principio otros esquemas cooperativo-diplomáticos. (Javier Bonilla)