El convenio de Honduras-Israel bajo una nueva lupa
Julio Montes, 19 de enero de 2017
En el año 2014 Honduras aprobaba una ley que le permitía derribar aviones civiles sospechosos, lo que se consideró una violación del Convenio de Chicago de diciembre de 1944 y del Tratado Internacional de Aviación Civil de 1953. Pero la Fuerza Aérea de Honduras ya practicaba el derribo de aviones civiles sospechosos, con el visto bueno de EEUU. En marzo de 1987 un DC-3 era derribado por un C-101, armado con un cañón de 30mm, que interceptó la aeronave, con matrícula 49454, pilotada por Joseph Bernard Mason, derribándola en el área de El Caserío, cercano a la frontera con El Salvador. La propia CIA implementó el Programa de Negación Aérea (ABD – AirBridge Denial), proveyendo información de vuelos sospechosos a Colombia y Perú para su derribo.
Entre 1995 y 2001, unas 15 aeronaves civiles sospechosas de llevar narcóticos fueron derribadas en Perú bajo esas directrices. Sin embargo, en abril del 2001, un avión de la Fuerza Aérea del Perú forzaba con metralla una avioneta a tierra, dando muerte a la misionera Roni Bowers y a su recién nacido. Esto marcaría el final de esas operaciones y un cambio en la política estadounidense. Sin embargo, el ABD fue restablecido en el año 2003 con Colombia, después del establecimiento de varios niveles de seguridad, con EEUU suministrando $68 millones en ayuda entre 2003 y 2004 y otros $26 millones entre 2005 y 2006. Colombia lograría la captura de 14 aeronaves entre octubre del 2003 y julio del 2005 bajo esas nuevas condiciones....
Contenido solo disponible para suscriptores
Identificación
Suscríbase
Si no dispone de cuenta Paypal, pague con su tarjeta de crédito o débito