Un nuevo escándalo involucra a la ex Secretaría de Inteligencia, hoy rebautizada AFI (Agencia Federal de Inteligencia), y amenaza con tener repercusiones impensadas en las próximas semanas. Ha sido robado un servidor del departamento de Análisis Interior, que depende de la Dirección General de Análisis, en el que se almacenaban 30 años de información y archivos sobre distintos "objetivos" de la ex SIDE: políticos, empresarios, funcionarios, periodistas, narcotraficantes e incluso otros espías de países vecinos.
Esta base de datos con información reservada ha sido popularizada como “carpetas”. De allí surgió el término "carpetazo", muy usado en los últimos años, cuando esa información era filtrada hacia medios periodísticos alineados con el gobierno para atacar al "objetivo" del momento. La carga de datos a esas fichas era realizada por alrededor de una veintena de empleados de la Agencia, militantes de la agrupación La Cámpora. La investigación interna hasta el momento tendría un sospechoso principal: un militante de la agrupación política kirchnerista La Cámpora, que ingresó a principios de 2015 y es uno de los jefes del departamento responsable de custodiar esa información, tan delicada y sensible.
Si bien las autoridades de la AFI se muestran preocupados por la pérdida de información -es probable que esos datos tengan respaldo en otros servidores-, uno de los mayores temores es que en las próximas semanas se desate una nueva campaña de "carpetazos", basados en los bytes almacenados en el servidor que fue hurtado. (Luis Piñeiro, corresponsal en Argentina)
Fotografía: La entrada al edificio de la AFI, la entrada al misterio.