El pasado 2 de octubre, Marruecos y Estados Unidos suscribieron un acuerdo por un período de 10 años para fortalecer la cooperación militar, dos días después de que Washington y Túnez firmaran uno en la misma línea. El anuncio del acuerdo entre Washington y Rabat se produjo durante una rueda de prensa conjunta entre el ministro marroquí de Defensa, Abdellatif Loudiyi, el ministro de Relaciones Exteriores, Nasser Bourita, y el secretario de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, de visita oficial en Marruecos.
Bourita dijo en la conferencia que Rabat y Washington firmaron un acuerdo para fortalecer la cooperación militar contra amenazas comunes que se extenderá hasta 2030 y explicó que en él también se enmarca el programa para la modernización de la industria militar y de defensa en Marruecos.
Esper destacó que "abrirá las puertas a la cooperación trilateral entre Marruecos, América y los países africanos", como demuestran las maniobras African Lion, lanzadas entre Marruecos y Estados Unidos en 2007 con la participación de varios países africanos para desarrollar las habilidades de combate de las fuerzas participantes.
Estados Unidos es el principal proveedor de armas de Marruecos, mientras que Argelia, visitada el jueves pasado por Esper, es un importante comprador de armamento ruso.
Loudiyi ha mantenido asimismo conversaciones con Esper, según un comunicado de la Defensa Nacional de Marruecos, para fortalecer la cooperación militar y promover las inversiones estadounidenses en proyectos de la industria de defensa en Marruecos.
Loudiyi propuso "la promoción de proyectos conjuntos para invertir en Marruecos en el sector de la industria de defensa con el objetivo de transferir tecnologías y construir gradualmente la independencia de Marruecos en este ámbito".
El ministro marroquí también precisó el compromiso de Marruecos de "luchar contra el terrorismo y adoptar medidas humanitarias para resolver la crisis migratoria, en base a su papel como actor de estabilidad regional en el Sahel y el Mediterráneo", según el mismo comunicado de prensa.
El acuerdo Washington-Rabat sigue a uno similar firmado por el secretario de Defensa de Estados Unidos en Túnez el 30 de septiembre. El papel de Estados Unidos en el apoyo a las Fuerzas Armadas tunecinas ha evolucionado en los últimos años, en particular a través de la formación y el equipamiento para combatir el terrorismo, así como para proteger sus fronteras con la vecina Libia, donde la situación de seguridad empeora con el incremento de las intervenciones extranjeras.
Washington ha considerado a Túnez un aliado importante desde 2015 sin ser miembro de la OTAN y le ha brindado creciente apoyo, ya que la situación en Libia se ha ido tornando cada vez más inestable.
Respecto a la visita relámpago a Argelia del secretario de Defensa de los Estados Unidos, Mark Esper se reunió con el presidente argelino Abdelmadjid Tebboune y con el Estado Mayor argelino, pero a diferencia de Marruecos y Túnez, no se firmó ningún acuerdo.
Argelia percibe a Estados Unidos como gran aliado de Marruecos, al que se describe como socio estratégico y principal aliado en el norte de África, en tanto Argelia está en la esfera de influencia rusa, a pesar de su intentos de independencia en sus decisiones estratégicas. (Mohammed Halimi)