La Fuerza Aérea Brasileña realizó con éxito la interceptación cerca de la ciudad paulista de Gavião Peixoto de una aeronave Beechcraft Baron 58 que ingresó al espacio aéreo brasileño procedente de Paraguay con más de 500 kilogramos de clorhidrato de cocaína. Para la misión se utilizaron dos Embraer A-29 Super Tucano y un Embraer E-99, en una accion realizada en conjunto con la Policía Federal.
Al ingresar al espacio aéreo brasileño sin plan de vuelo, el avión pasó a ser monitoreado por el Comando de Operaciones Aeroespaciales (COMAE) y la Policia. A partir de entonces, los pilotos de defensa aérea siguieron los protocolos de Medidas de Vigilancia del Espacio Aéreo (MPEA) y la aeronave fue catalogada como sospechosa, según lo dispuesto en la normativa vigente.
Tras incumplir las órdenes de los pilotos de la Fuerza Aérea Brasileña, fue necesario que la defensa aérea ordenara el disparo de advertencia. En ese momento, la aeronave realizó un aterrizaje forzoso en una pista de tierra cerca de Gavião Peixoto. Posteriormente, la Policía Federal se hizo cargo de las Medidas de Control de Suelo (MCS). Los dos tripulantes que iban a bordo escaparon antes de la llegada de la policía. (Javier Bonilla)
