El Ministerio de Hacienda aprobaba este martes un gasto de 167 millones de euros para la construcción del Buque de Acción Marítima de Intervención Subacuática (BAM-IS) para el Ministerio de Defensa. Basado en la plataforma del Buque de Acción Marítima (BAM) estará destinado a misiones de salvamento y al apoyo al rescate de submarinos e incluye algunas de las líneas estratégicas de la Armada Española, como son el gemelo digital y la ciberseguridad.
Este programa está incluido dentro del Plan Estratégico de Navantia y se considera clave para el astillero de Puerto Real en Cádiz.
Según explica la SEPI, el techo de gasto necesario estimado es de 200 millones de euros. De este importe, 167 millones corresponden a los trabajos de Navantia , otra partida de unos 20 millones a la compra de equipos de exploración submarina y el resto a propuestas de cambio y revisiones.
Para la Bahía de Cádiz, el contrato supondrá una carga de trabajo de 1,3 millones de horas durante tres años y medio. En ese periodo se generará un valor añadido directo e indirecto para la economía de aproximadamente 54 millones de euros anuales y una demanda agregada de 159 millones anuales. Durante ese plazo se crearán 1.115 empleos anuales, entre directos, indirectos e inducidos. De ellos, casi 160 serían empleados directos, cerca de 290 de la industria auxiliar y 665 puestos de trabajo indirectos generados por suministradores e inducidos.
Descripción del buque
El nuevo buque deberá reemplazar al BSR (Buque de Salvamento y Rescate) “Neptuno” de la Armada española. El BAM-IS será un buque de rescate submarino y apoyo a buceadores de fácil y rápido alistamiento, con capacidad de permanencia en la mar.
La Subdirección General de Adquisiciones de Armamento y Material (DGAM) adjudicó en 2016 a la empresa SEAPLACE el apoyo técnico para la obtención de este buque de intervención subacuática. SEAPLACE se ha encargado del servicio de apoyo técnico en el estudio de las alternativas de obtención del buque de intervención subacuática de la Armada (BAM-IS). Esta empresa, con experiencia en el sector de la ingeniería naval, estudió las alternativas de obtención del Buque de Intervención Subacuática de acuerdo con los Requisitos de Estado Mayor (REM) firmados por el entonces Almirante Jefe del Estado Mayor de la Armada (AJEMA) el 9 de julio de 2015 y validados por el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD).
El trabajo se materializó en la entrega de documentación técnica según una serie de requisitos, a saber: El BAM-IS será un buque de rescate submarino y apoyo a buceadores de fácil y rápido alistamiento, con capacidad de permanencia en la mar. Sus sistemas deben ser interoperables con los de otras naciones, en especial los de países OTAN, para actuar como buque que apoya o apoyado.
Características generales
La plataforma, según los requisitos conocidos hasta la fecha, deberá tener la estabilidad adecuada para efectuar con seguridad operaciones de salvamento y rescate de submarinos y apoyo a operaciones de buceo. Buena maniobrabilidad para operar en espacios restringidos, velocidad sostenida adecuada, para reducir los períodos de tránsito y dar respuesta rápida a los accidentes de submarinos y otras emergencias, contará con un sistema de posicionamiento dinámico clase 2 del IMO (International Maritime Organization).
Contará con un sistema de referencia hidroacústico submarino para seguimiento y posicionamiento de los buzos, vehículos submarinos y otros objetos sumergidos y fondo con respecto a la plataforma. Dispondrá de instalaciones para apoyo y mantenimiento de equipos y sistemas de buceo, medios adecuados de carga y descarga, orgánicos y modulares para recuperación de objetos y lanzamiento y recogida de vehículos submarinos y sistemas de buceo.
La planta eléctrica tendrá la potencia necesaria y redundante que permita llevar a cabo simultáneamente la navegación segura, el funcionamiento normal del buque y el trabajo de todos los equipos de salvamento, rescate y buceo. Contará con una alta automatización de los sistemas que permita su empleo con seguridad a una dotación reducida. Su sistema de propulsión deberá ser silencioso.
Tendrá una amplia cubierta de trabajo, que permita el despliegue y operación de los sistemas que debe montar el buque. Dispondrá de una cubierta de vuelo que permita la toma, incluso con el Sistema de Rescate de Submarinos embarcado, de un helicóptero medio en condiciones VMC, caso de no ser posible deberá contar con capacidad VERTREP (reaprovisionamiento vertical mediante helicóptero). Tendrá la capacidad para embarcar y operar medios modulares de lucha contra la contaminación por hidrocarburos y capacidad deseable para de almacenamiento y descarga de residuos de hidrocarburos en tanques propios.
Las características operativas se refieren a seis tipos de misiones
En lo que se refiere a salvamento y apoyo al rescate de submarinos, contará con los medios adecuados para la coordinación de operaciones de búsqueda, salvamento y apoyo al rescate de submarinos u otros buques o artefactos hundidos. Sistemas de exploración, búsqueda, detección, localización e identificación, así como para efectuar levantamientos fisiográficos del relieve submarino. Contará con sistemas para proporcionar capacidad de ventilación, despresurización controlada, monitorización de la atmósfera interna del submarino y reflotamiento de un submarino hundido (Distressed Submarine o DISSUB). Tendrán configuración modular y serán fácilmanete despelgables para su empleo en otras plataformas. Deberá poder suministrar provisiones de emergencia (Emergency Life Support Stores o ELSS) a un submarino hundido mediante contenedores estancos cilíndricos (pods) normalizados. Los pods y sus sistemas de transporte serán también desplegables.
En lo que se refiere al rescate de submarinos, el buque sertará preparado para ser certificado como buque de Rescate de Submarinos (Mother Ship o MOSHIP) y operar un Sistema de Rescate de Submarinos (NATO Submarine Rescue System o NSRS o Submarine Rescue Diving Recompression System SRDRS).
Para tareas de apoyo a operaciones de buceo, contará con sistemas de buceo automático con aire o mezcla de gases hasta 50 y 120 metros de profundidad respectivamente, sistema para intervención con buzos de hasta 120 metros con mezclas de helio y oxígeno. Estos sistemas serán modulares, y posibilitarán su empleo en otras plataformas si fuera necesario. Por último el buque estará capacitado para embarcar un sistema de buceo de saturación o un sistema ADS (Atmospheric Diving System) ajeno a la Armada.
Para misiones de intervención y rescate en accidentes y naufragios, además de sistemas de detección submarina, el buque deberá estar dotado de dos ROV, preferentemente modulares y desplegables, uno de ellos de observación y el otro de trabajo que le permita realizar intervenciones hasta la profundidad que se defina y con al menos las funcionalidades de brazo de fuerza y de precisión, transporte de pods, herramienta de corte y cizalla, video, sonar y transponder de localización y seguimiento. El buque estará equipado con al menos una grúa de gran capacidad que permita la recuperación de objetos sumergidos hasta la máxima profundidad de trabajo de los ROV.
Para misiones de vigilancia y monitorización del Patrimonio Subacuático, el ROV y los equipos de buceo, así como los sistemas de exploración, búsqueda, detección, localización e identificación, permitirán la intervención para trabajos de monitorización, control y protección del patrimonio subacuático.
Por último para tareas de apoyo médico, para sus misiones tanto en salvamento y rescate de submarinos como en el de apoyo a las operaciones de buceo, el buque contará con instalaciones hiperbáricas y medios de sanidad adecuados a la entidad del buque y para tratamiento de los accidentes propios de las actividades de buceo. Instalaciones hiperbáricas y medios de sanidad propios y orgánicos del Sistema Internacional de Rescate adecuados en número y capacidad para la asistencia inicial y el tratamiento hiperbárico progresivo de la dotación de un submarino siniestrado.
En lo que se refiere su logística e inmovilización, tendrá una autonomía que le permita una permanencia continuada en la mar de 25 días sin necesitar reaprovisionamiento, autonomía de gases respirables (helio y oxígeno) para sostener operaciones de buceo de forma autónoma, capacidad de almacenamiento adicional de contenedores de gases para operaciones de mayor duración. Podrá alojar a 30-34 personas de la dotación para el manejo del buque y de sus sistemas orgánicos y entre 26 y 30 personas de transporte para llevar a cabo los cometidos asignados en los diferentes perfiles de misión. Inmovilización después de 10 meses de navegación por un período no superior a 20 meses. Inmovilización programada (PIP) cada tres años por un período no superior a 8 semanas. PIP y varada cada cinco años, deseable seis, por un período no superior a once semanas. (José Mª Navarro García)