El pasado 28 de julio, se publicó en el BOE la Orden DEF/708/2020 por la que se desarrolla la organización básica del Ejército de Tierra. Los cambios derivados de esta organización orientada a la misión se están llevado a cabo de forma sucesiva según planeamiento detallado para que los mismos tuviesen lugar de la forma más adecuada.
La Fuerza del Ejército de Tierra es la estructura más afectada por este proceso; constituida por órganos, dependientes directamente del JEME - Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad, Fuerza Terrestre y Mando de Canarias del Ejército de Tierra- se reduce a tres Mandos de primer nivel, desapareciendo la Fuerza Logística Operativa e incluyéndose en la Fuerza Terrestre sus unidades.
La Fuerza Terrestre queda constituida por la División «Castillejos», la División «San Marcial» y el Mando de Apoyo a la Maniobra (de nueva creación). De esta forma se reduce notablemente la esfera de control de su General Jefe, pasando a depender de esa autoridad 3 Divisiones/Mando en lugar de las 2 Divisiones, 6 Mandos, 3 Comandancias Generales y 4 Regimientos que lo hacían en la orgánica anterior. Se facilita así el mando y control del conjunto y cada una de las partes se organiza en función de sus cometidos principales.
Este cambio en la organización de las Divisiones y la creación del Mando de Apoyo a la Maniobra, será efectivo el próximo día 01 de enero de 2021.
En la División «Castillejos» se incluyen todas las brigadas de combate, brigadas “de proyección”: «Aragón» I, «Rey Alfonso XIII» II de La Legión, «Galicia» VII, «Guzmán el Bueno» X, «Extremadura» XI y «Guadarrama» XII.
Con un cuartel general desplegable y con posibilidad de planear, conducir y realizar el seguimiento de operaciones, esta división generará y preparará las brigadas atribuidas a los diferentes compromisos en el ámbito nacional e internacional, siendo capaces de integrarse en estructuras conjuntas y combinadas.
Como un conjunto de capacidades especiales, la División «San Marcial» se encargará de generar y adiestrar unidades con capacidades muy específicas y con una alta disponibilidad: ligeras, fácilmente proyectables, especializadas en entrada inicial o reacción inmediata, con capacidad de asalto aéreo, con posibilidad de combatir en montaña o en condiciones de frío extremo, capaces de llevar a cabo operaciones especiales, maniobra aeromóvil,…. Forman parte de esta división la Brigada «Almogávares» VI de Paracaidistas, el Mando de Tropas de Montaña (de nueva creación), el
Mando de Operaciones Especiales «Órdenes Militares», las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra y otras pequeñas unidades que se determinen. El Mando de Apoyo a la Maniobra (de nueva creación), dispone de las estructuras de Apoyo al Combate y apoyo Logístico al Combate. Por ello incluye en su organización de los Mandos de Artillería de Campaña, de Artillería Antiaérea, de Ingenieros, de Transmisiones, la Brigada Logística y otras unidades de apoyo a determinar.
Este mando se encargará de preparar y generar las fuerzas que se requieran, en ámbitos conjuntos o combinados, así como de proporcionar diferentes tipos de capacitadores que se precisen.
La integración de las unidades de apoyo logístico al combate de la Brigada Logística, que hasta ahora dependía de la Fuerza Logística Operativa, en la Fuerza Terrestre supone que todas las unidades que constituyen organizaciones operativas terrestres se encuentran bajo el mismo mando, que aglutinará las responsabilidades de la preparación, generación y sostenimiento de estas organizaciones operativas.
Además, en el seno de esta brigada se incluye una Agrupación de Sanidad que permitirá obtener una mayor eficiencia del personal sanitario puesto a disposición del Ejército de Tierra y aumentar la eficacia del apoyo sanitario en las operaciones.
El Mando de Canarias del Ejército de Tierra, también se ve afectado por la nueva organización, sumando a la Brigada «Canarias» XVI la incorporación de las tres Comandancias Generales de Ceuta, Melilla y Baleares. Se agrupan así unidades, fuerzas de presencia, con responsabilidades comunes en un solo conjunto orgánico. El cambio de dependencia orgánica de las comandancias Generales tuvo lugar el pasado 01 de septiembre de 2020.
A modo de resumen, la nueva organización del Ejército de Tierra, mejora la respuesta de nuestro Ejército a la cada vez más rápida evolución del entorno, ofrece numerosas ventajas a la hora de constituir organizaciones operativas para ser empleadas en operaciones, facilitando la transferencia de fuerzas a la estructura operativa de las Fuerzas Armadas y orientando la preparación a las misiones que se van a requerir de las distintas unidades prestando particular atención a la prevención y respuesta a pandemias y crisis sanitarias.
Además, simplifica la estructura organizativa y reduce las esferas de control de los distintos mandos, facilitando la labor de los respectivos cuarteles generales.