Finalmente el pesquero chino “Xaafuun” secuestrado a finales de noviembre en la costa de Somalia ha sido liberado por sus secuestradores según ha informado la embajada china en dicho país. El barco era monitorizado por la fragata “Santa maría” de la Armada española en el marco de la misión Atalanta.
La embajada china en Somalia ha informado a través de las redes sociales que este pasado 13 era liberado el buque y sus dieciocho tripulantes sin que se produjeran heridos, encontrándose ya de vuelta a China. En el comunicado no se aclara si se ha pagado el rescate reclamado por los secuestradores.
En el citado comunicado, el Gobierno chino a través de su embajada en Somalia ha “condenado enérgicamente esta acción cruel que amenaza la seguridad de la tripulación y de la navegación internacional”. Además cita que “seguirá salvaguardando los derechos de los ciudadanos y empresas chinas en el exterior y trabajando para garantizar la seguridad de la navegación internacional”.
Ni en el comunicado de la embajada china ni en la nota publicada por EUNAVFOR se detallan operación de rescate alguna por lo que es más que posible que se haya llegado a algún tipo de acuerdo con los secuestradores. De hecho, se menciona que se ha trabajado con las autoridades del Gobierno de Somalia y las del estado semiautónomo de Putlandia en cuyas aguas tuvo lugar el secuestro.
EUNAVFOR sigue destacando en sus comunicados que se trata de un incidente del tipo “armed robbery at sea” o “robo en alta mar” y ahora en concreto a “caso de piratería en aguas territoriales” en lugar de secuestro. Es más, EUNAVFOR informa de la finalización del incidente remitiéndose a la información recibida por la embajada china en Somalia.
EUNAVFOR recuerda en estos comunicados que la misión Atalanta se mantiene comprometida con la disuasión, prevención y represión de la piratería en el área de operaciones, manteniéndose coordinada con los actores regionales. Sin embargo, cabe plantearse la utilidad de este dispositivo al menos en el caso actual, en el que la acción de los buques de guerra se ha limitado a observar el devenir de los acontecimientos, probablemente por estar el buque en aguas territoriales somalíes y ser un buque de fuera de la Unión Europea.
Operación Atalanta
La Operación Atalanta fue el resultado de una serie de resoluciones de la ONU, adoptadas tras el incremento de los actos de piratería en el océano Índico a partir de 2005. Con el apoyo de España, se ha convertido en la primera operación naval de la Unión Europea que se realizaba en el marco de la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD). En diciembre de 2024, la operación Atalanta se prorrogó hasta febrero de 2027, lo cual refleja los logros alcanzados y los retos para el futuro.
En todo este tiempo, la zona de operaciones se ha ampliado en mandatos sucesivos y, en la actualidad, comprende el Golfo de Adén y países vecinos, incluido el puerto y la ciudad de Muscat (Omán), la cuenca somalí, mar Rojo, Golfo de Suez y Golfo de Aqaba.
En la actualidad, bajo control operativo del Mando de Operaciones, España contribuye a la Operación ‘Atalanta’ con aproximadamente 350 militares, así como con el Cuartel General de la Operación, OHQ, en la base naval de Rota, una fragata/buque de guerra, un helicóptero embarcado, un equipo de operaciones especiales embarcado, un avión de reconocimiento y vigilancia marítima (DAT ‘Orión’) en Yibuti, las oficinas de Enlace localizadas en Mogadiscio (Somalia), Manama (Bahréin), Bruselas (Bélgica) y Puerto Victoria (Islas Seychelles) y una Unidad de Apoyo Logístico para la Operación desplegada en Yibuti (Yibuti).
España ha sido el único país de la Unión Europea que ha participado de manera ininterrumpida en la Operación ‘Atalanta’ desde su lanzamiento hace 16 años. (José Mª Navarro García)