El nuevo submarino “Isaac Peral” (S-81) comenzó el pasado 8 de marzo su primera navegación nacional desde el Arsenal de Cartagena, una jornada histórica para la Armada española.
Al mando del capitán de corbeta Manuel Corral Iranzo, el S-81 marca un hito en la modernización de la flota naval española en la categoría de los submarinos. Esta nueva fase sigue a un intenso programa de pruebas y adiestramiento que ha involucrado durante el último año a su dotación, formada por 49 hombres y 5 mujeres, quienes han trabajado con una gran dedicación para garantizar la operatividad de este buque de última tecnología.
El “Isaac Peral” es el primer submarino del tipo S-80, una serie de 4 unidades diseñada para sustituir a los antiguos tipos S-60 y S-70, de las que solo queda en servicio el “Galerna” (S-71). Con la llegada de estos 4 submarinos la Armada busca recuperar parcialmente la alta capacidad de la FLOSUB (Flotilla de Submarinos), que llegó a contar con hasta 8 unidades entre 1986 y 2003.
Este nuevo submarino destaca por ser el primero construido íntegramente en el astillero de Navantia en Cartagena (Murcia), una obra que resalta la capacidad industrial y tecnológica del país. Tras superar múltiples problemas presupuestarios y técnicos durante su desarrollo, el S-81 fue puesto a flote el 7 de mayo de 2021 y, tras su rigurosa fase de pruebas, fue entregado oficialmente a la Armada el 30 de noviembre de 2023.
El pasado mes de febrero, en una entrada en la cuenta de X del Ministerio de Defensa, se informaba que: “El S-81 ‘Isaac Peral’ está listo para entrar en alta disponibilidad. Este julio, la Armada española dará un paso clave en la modernización del arma submarina. Ha recorrido 5.500 millas, acumulado 1.200 horas de navegación y en junio llevará a cabo su primer lanzamiento real de torpedos”.
El primer lanzamiento de un torpedo real, tras disparar varios de pruebas que tienen un color naranja, se materializará en aguas de Canarias, donde durante el ejercicio SINKEX-25 el submarino lanzará por primera vez un torpedo real, en concreto de los pesados y filoguiados Atlas Elektronik DM2A4. El objetivo será un antiguo buque de la Institución, que será rematado por el S-81, tras ser blanco previamente de los sistemas artilleros y misiles de navíos de superficie y aeronaves de la Armada española.
El “Isaac Peral”, recalca la Armada, simboliza no solo un logro tecnológico, sino también un paso importante para la seguridad y la defensa nacional. Con la incorporación de este submarino a la flota, España refuerza su capacidad operativa en el mar, destacando por su tecnología avanzada y la excelencia de su personal. Este avance representa un compromiso con la modernización de las Fuerzas Armadas y un paso significativo en la construcción de una flota más eficiente y capaz. (Julio Maíz)
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