La compañía Schiebel en colaboración con Nordic Unmanned ha puesto en marcha una serie de pruebas para validar la posibilidad de emplear una aeronave no tripulada para medir los niveles de contaminación de los buques. Concretamente se ha realizado una prueba de dos días con dos vuelos de cuatro horas cada uno en las proximidades de Gniben, Dinamarca, durante los que se empleó una aeronave no tripulada CAMCOPTER S-100 de Schiebel dotado de un detector de azufre.
Los buque que operan en las congestionadas rutas comerciales europeas tienen limitadas las emisiones de óxido de azufre al 0,1 por ciento. Para reforzar la normativa actual de la Organización Marítima Internacional (IMO por sus siglas en inglés), una opción es emplear aeronaves no tripuladas como el citado CAMCOPTER S-100 equipados con un analizador de emisiones que permita medir el óxido de azufre. El UAV vuela cerca de la columna de humo que sale de la chimenea del buque y asocia las mediciones al buque usando el Sistema de Identificación Automática (Automatic Identification System o AIS).
Usando un medidor certificado se pueden obtener mediciones fiables y en tiempo real de azufre y el CAMCOPTER S-100 resultó ideal para ello, realizando las diez mediciones previstas durante las pruebas. Se trata de una solución que pueden emplear las diferentes autoridades marítimas de cada país para hacer cumplir las regulaciones IMO 2020. Además del AIS y el sensor de azufre, el CAMCOPTER S-100 empleaba su habitual carga de pago electroóptica L3 Harris Wescam MX-10. (José Mª Navarro García)
Fotografía: Un CAMCOPTER S-100 (Schiebel)