La Fuerza Aérea de los Estados Unidos sigue adelante con su plan de retirada de uno de sus más míticos aviones de reconocimiento, el U-2 Dragon Lady, durante el año fiscal 2026.
Los altos mandos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos o United States Air Force (USAF) llevan casi dos décadas considerando la posibilidad de retirar su ya reducida flota del U-2, pidiendo en varias ocasiones al Congreso que lo autorice. A esa petición se suma la de dar también de baja el sistema aéreo remotamente tripulado o Remotely Piloted Aircraft Systems (RPAS) RQ-4, que se diseñó y construyó precisamente para sustituir a los longevos U-2, que se gestaron y entraron en servicio en los años cincuenta del pasado siglo.
El U-2
El U-2 se desarrolló a principios de la Guerra Fría para espiar más allá del telón de acero, en una época en que no existían los satélites, y los pujantes servicios de inteligencia necesitaban cada vez más datos, como las fotografías que iban a proporcionar los U-2 durante décadas. Corría el mes de agosto de 1955 cuando la entonces Lockheed (hoy Lockheed Martin) lograba poner en vuelo por primera vez el prototipo del que el luego se denominaría Dragon Lady. El éxito del diseño condujo a ordenar ,con fondos de la USAF y la CIA, su construcción en serie.
En 1956, los U-2 empezaron a operar, en total secreto, sobre la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), para fotografiar las instalaciones militares e industriales amparados en su techo operativo de más de 20.000 metros, lo que les hacia invulnerables a los cazas de la época.
En 1960, el aparato fue objeto de la atención mundial cuando el que pilotaba el oficial de la USAF Francis Gary Powers fue derribado sobre territorio soviético por una salva de 14 misiles del por entonces novedoso sistema suelo-aire SA-2, siendo capturado éste, y posteriormente canjeado por un agente soviético, como cuenta en detalle la novela y la película “El puente de los espías”. Menos suerte tuvo, en octubre de 1962, el mayor Rudolph Anderson de la USAF, a los mandos de un U-2 de la 4080 Ala de Reconocimiento Estratégico, ya que murió cuando fue derribado mientras fotografiaba a las tropas soviéticas instalando misiles nucleares en Cuba, agravando la crisis de los misiles cubanos, que casi desembocó en la Tercera Guerra Mundial. La fama, del hasta entonces avión secreto, llevó en 1976 a que un grupo de música irlandés, usase la designación del avión de Lockheed.
Otra imagen del polivalente avión de los años cincuenta Lockheed U-2. (Foto USAF)
De la Guerra Fría a Irak
A aquellas misiones de la Guerra Fría, se fueron sucediendo todas las operaciones militares de Estados Unidos, incluidas las de Irak, ya en el siglo XXI, incluso durante los últimos meses fuentes chinas, en plena crisis de Taiwán, denunciaron la presencia de los U-2 sobre la China Continental.
Volviendo al presente, el senador Ted Budd, republicano por Carolina del Norte, se refirió al plan del servicio para el U-2 la semana pasada en una audiencia de la Comisión de Servicios Armados del Senado sobre la solicitud de presupuesto del Departamento de la Fuerza Aérea Aire para el año fiscal 2024, asegurando que ya se contemplaba la baja del aparato.
La última serie de documentos presupuestarios reconoce que la USAF tienen previsto mantener la flota de U-2 hasta finales de septiembre de 2025, para destinar posteriormente dichos fondos a otras prioridades.
Las leyes anuales de política de Defensa aprobadas por el Congreso han tratado de garantizar que la USAF tenga un reemplazo adecuado para el U-2 y el RPAS RQ-4 antes de retirar los activos en los que sus mandos confían para obtener datos de inteligencia. Una vez que se supriman esas flotas, la USAF recurrirá principalmente a los sistemas espaciales para recoger un conjunto similar de imágenes de gran altitud, según su solicitud presupuestaria.
Actualmente quedan en servicio sólo 27 U-2 de la USAF (más algunos de la NASA), de los 104 que se construyeron, se encuentran en la base aérea de Beale (California) y rotan por instalaciones militares de todo el mundo para realizar dichas misiones de inteligencia.
Este medio, que se acerca a los 70 años en servicio, ha usado los enormes botes con rollos de película, que tenían que ser enviados a Beale y revelados allí por la 9ª Ala de Reconocimiento, hasta que pasado verano se pasaron por fin a la era digital.
Últimamente, los Dragon Ladies han asumido un nuevo papel como bancos de pruebas para una serie de tecnologías de reconocimiento y comunicación más avanzadas, y han ayudado a probar nuevas herramientas de inteligencia artificial en la búsqueda de mejora de los RPAS de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos. El U-2 también se está utilizando como plataforma sustituta en el sistema de gestión de batalla avanzado o Advanced Battle Management System de la USAF, que pretende mejorar las capacidades de intercambio de datos en tiempo real con el resto de activos militares de los Estados Unidos. (Julio Maíz)