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Jueves, 19 de septiembre de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

La Marina estadounidense da carpetazo al helicóptero no tripulado FireScout

Un MQ-8C toma en la cubierta de un buque de la Marina estadounidense (Northropp Grumman)
Un MQ-8C toma en la cubierta de un buque de la Marina estadounidense (Northropp Grumman)

La Marina estadounidense ha potenciado en los últimos años sus medios aéreos no tripulados, siendo uno de los más significativos el helicóptero embarcado FireScout con el que se estaban dotando diferentes buques de superficie, como los Littoral Combat Ship o lo haría la nueva fragata clase Constellation. Sin embargo, los altos costes del programa han dado al traste con el helicóptero fabricado por Northropp Grumman, que será retirado del servicio rápidamente, escasamente dos años después de su entrada en servicio.

El helicóptero no tripulado FireScout de Northrop Grumman prometía revolucionar las capacidades de los buques donde se desplegara, ofreciendo capacidades de inteligencia en tiempo real, reconocimiento, adquisición de objetivos y de fuego directo con cohetes guiados.

A diferencia de las dos versiones iniciales, la adopción del fuselaje del helicóptero comercial Bell 407 prometía más autonomía, capacidad de carga, menos firma logística y una homogeneización con otras plataformas ya extendidas.

Sin embargo los costes no se han reducido y los plazos se han alargado considerablemente. Baste recordar que en 2016 la Marina estadounidense contrató diez de estos aparatos por nada menos que 108,1 millones de dólares.

La silueta del Bell 407 es fácilmente reconocible (US Navy)

Sin embargo el próximo ejercicio presupuestario de la Marina estadounidense no incluirá partida alguna para este aparato y el próximo mes de octubre se comenzará a retirar del servicio activo, escasamente dos años después de que comenzara a desplegarse. En el verano de 2019 consiguió la Capacidad Operativa Inicial (IOC) y en diciembre de 2021 fue desplegado por primera vez a bordo de uno de los LCS, el USS Milwaukee, sin embargo desde entonces estos aparatos solo han podido ser desplegados en cuatro de estos buques.

La solicitud presupuestaria de la Marina estadounidense para el año fiscal 2025 no incluye partida alguna para el FireScout, destacando que “el empleo operacional del MQ-8C acabará el cuarto trimestre del año fiscal 2024” y la flota será retirada el cuarto trimestre del año fiscal 2026” (recordemos que el año fiscal estadounidense acaba en septiembre).

La Marina estadounidense preveía adquirir 177 MQ-8C por 3.470 millones de dólares para desplegar entre sus buques de superficie, tras invertir aproximadamente 1.500 millones de dólares en su desarrollo. Sin embargo de los 36 aparatos en servicio solo 17 están operativos según el documento presupuestario citado y los otros están almacenados en instalaciones de la Marina.

Tras esta decisión podría estar el alto coste del aparato en comparación con aeronaves mucho más baratas de adquirir y sostener que pueden hacer prácticamente lo mismo con una huella logística mucho menor. Un aparato de decenas de millones de dólares puede ser ahora reemplazado por aparato de pocas centenas de miles.

Queda por saber sin embargo, que sucederá con las fragatas clase Constellation que contaban con él para su operación, aunque preocupan menos los buques LCS de cuyo declive hemos informado en repetidas ocasiones.

Con un techo de servicio de 12.500 pies, una autonomía de 5,5 horas y 85 nudos de velocidad, un sistema formado por tres de estos aparatos debería ser capaz de proporcionar hasta 12 horas de operación continuada a los buques en los que embarcaran, operando hasta 110 millas náuticas de este. (José Mª Navarro García)

 

 

 


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