Los últimos estudios sobre la dinámica futura que afectará a los carros de combate se ha difundido en el marco de la feria AUSA celebrada por el Ejército de los Estados Unidos (United States Army) en Washington D.C.
Por lo que apuestan en el US Army, sus carros de combate van a tener que recibir una serie de mejoras y modificaciones para hacer frente a amenazas que se prevén incluyan también misiles hipersónicos compactos, que viajarán a gran velocidad intentando evitar su neutralización y buscando causar la destrucción de su objetivo como resultado de la gran cantidad de energía liberada en el momento del impacto.
Su altísima velocidad, junto a su masa, generará una notable cantidad de energía cinética que ningún blindaje será capaz de resistir sólo, una amenaza que hará que deba apostarse por una evolución en lo que se refiere a los sistemas de defensa activa que detectan la llegada de un posible proyectil y le disparan un proyectil para neutralizarlo mientras se encuentra en vuelo.
Las futuras amenazas de los carros de combate incluyen a misiles hipersónicos compactos que serán difíciles de interceptar y neutralizar. (Army Science Board)
La introducción paulatina a medio plazo de misiles hipersónicos compactos buscando acabar con los carros de combate no es la única amenaza a futuro que ya contemplan desde el U.S. Army. Prevén que a las ahora en boga municiones merodeadoras y sistemas autónomos basados en UAS (Unmanned Aerial System) se añadan otras clásicas, como misiles contracarro o drones armados, y se sumen otras novedosas que incluirán proyectiles con nuevas capacidades de penetración de blindaje y municiones avanzadas caracterizadas por una muy alta velocidad.
Todas esas amenazas que apuntan ya hacia los carros de combate son medios ofensivos que podrán atacarlo en cualquier lugar, buscando aquellos puntos donde esté menos protegido y, aparentemente, pueda ser más vulnerable. Las empresas estarían desarrollando ya esos misiles hipersónicos compactos y esas avanzadas municiones de hipervelocidad con las que desarrollar armas, ojivas y proyectiles que busquen un nivel de letalidad mucho más elevado que el actual.
Se buscará usar proyectiles de hipervelocidad que consigan penetraciones mucho mayores que los actuales diseños con sistemas tipo flecha.
La eterna lucha entre la coraza y la espada, siendo esta última las futuras amenazas en lo que a armas se refiere, influirá probablemente en diseños más compactos y de menos tonelaje en los que se apueste por equipos de protección activa de una futura generación, por tripulaciones más reducidas y mejor protegidas, o por conceptos en los que, a través de una nube de combate terrestre, operen a la vez carros de combate tripulados y carros de combate no tripulados.
Incluso, podría apostarse por algún tipo de tecnología disruptora que basada en conceptos de guerra electrónica, crease falsos objetivos terrestres que hiciesen que los misiles hipersónicos compactos no lo tuviesen fácil a la hora de centrar sus sistemas de guiado sobre un objetivo real. (Octavio Díez Cámara)