La necesidad de sustitución de los AV-8B Plus Harrier II, que los paupérrimos presupuestos de defensa de España niegan a la Armada española, es una realidad cada vez más próxima en la cercana Italia, socio de España en la OTAN y en la UE. El 24 de octubre realizó su vuelo inicial el primer Lockheed Martin F-35B italiano construido, bajo licencia, en la factoría de Cameri, cercana a Milán. Es un paso más en el proceso por el que la Marina Militare italiana sustituirá con este moderno aparato sus cazabombarderos Harrier.
Este primer F-35B Lightning II italiano, con capacidad de despegue y toma en corto y/o vertical o Short Take-Off Vertical Landing (STOVL), será destinado previsiblemente a la Marina Militare (MM) italiana, aunque también la Aeronautica Militare Italiana (AMI) los recibirá y operará.
La MM, que actualmente tiene dos navíos con capacidad de operar con aviones STOVL más uno en construcción, necesita de este tipo de aeronaves para garantizar la capacidad de protección a la flota y apoyo a las operaciones anfibias, tras la prevista baja de su veterana flota de Harrier II. Esta necesidad que también tiene la Armada, que ya hace muchos años gestionó la documentación de necesidad operativa, duerme el sueño de los justos debido a la baja inversión de España en materia de defensa.
En total Italia tiene previsto dotarse de noventa F-35, de los que 60 serán de la versión convencional F-35A y 30 de la F-35B con capacidad STOVL. El primer aparato de esta última versión, se presentó el pasado día 5 de mayo, tras salir de la FACO de Cameri, que pertenece a la multinacional italiana Leonardo, como ya informó defensa.com.
La italiana es junto a la planta de Lockheed Martin de Fort Worth (Texas-Estados Unidos) y la de Nagoya (Japón) las únicas en el mundo que producen este avión de combate de 5ª generación. La línea de producción italiana fabricará además 29 F-35A encargados por los Países Bajos para su Real Fuerza Aérea, con los que sustituirá su actual flota de F-16AM/BM.
Volviendo al primer vuelo del F-35B italiano, designado como BL-1, lleva las marcas nacionales de la República de Italia en baja visibilidad, aunque aparentemente no porta ninguna insignia de unidad que apunte a que irá destinado a la MM o el AMI cuando se entregue próximamente al Ministerio de Defensa.
Estamos ante el primero de los vuelos de pruebas “clasificados” que se realizarán desde la planta de Cameri, en este caso escoltado por un Eurofighter del AMI, muy posiblemente del Reparto Sperimentale di Volo (RSV), que tiene la responsabilidad de los vuelos de pruebas. Está también previsto que este primer F-35B italiano se traslade hasta la Naval Air Station (NAS) de Patuxent River, el centro de pruebas aeronáuticas de la US Navy , sito en Maryland (Estados Unidos), donde a principios de 2018 se probará y certificará su efecto electromagnético, conocido por su designación en inglés Electromagnetic Environmental Effects. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: El F-35B tiene plena capacidad para operar desde navíos anfibios. Foto: US Navy.