Un avión A400M reabasteció en el aire combustible con éxito a un convertiplano V-22 Osprey de la Marina de los Estados Unidos durante una campaña de vuelos de prueba realizada por la Fuerza Aérea alemana o Luftwaffe.
Según Airbus Defence & Space, que diseña y fabrica el avión de transporte, este hito amplía el papel del A400M al servicio de la Luftwaffe como avión cisterna y marca un paso hacia el aumento de la interoperabilidad con los socios de la OTAN, en concreto con los Estados Unidos, que es el único aliado que opera el sistema Bell/Boeing V-22.
El reabastecimiento de combustible en vuelo de los helicópteros es una capacidad que ha tardado mucho más de los previsto en obtenerse por parte del A400M, en su rol de aparato de reabastecimiento en el aire o AAR (Air-to-Air Refuelling).
Dicha capacidad era altamente demandada por parte tanto de la Luftwaffe como de sus aliados franceses de la Fuerza Aérea y del Espacio o AEE (Armée de l'Air et de l'Espace) francesa, lo que justificó en su momento la compra de sendas flotas de Lockheed Martin C-130J/KC-130J Súper Hercules, que operan de forma conjunta en la base aérea francesa de Évreux-Fauville, como ya explicó defensa.com.
De hecho, para tal maniobra, el A400M debe bajar sus flaps para reducir su velocidad a 200-240 km/h, lo que provoca fuertes turbulencias para el helicóptero que vuela en su estela. Para solucionar este problema, se aplicó la fórmula de utilizar una tubería flexible más larga, de una decena de metros de longitud, pero con un diámetro reducido para poder alojarla en la góndola estándar Cobham 905E, que emplea el tanto el A400M como su “hermano” de fabrica, el A330 MRTT.
El problema quedó así solucionado, aunque debido a que el caudal es más lento, la transferencia de combustible a un helicóptero tarda más respecto a otras aeronaves. En cualquier caso, quedaba por ver si el A400M podía hacer lo mismo con el V-22 Osprey, una aeronave equipada con rotores basculantes que despega como un helicóptero y vuela como un avión, pudiendo alcanzar una velocidad máxima de 500 km/h, lo que facilita el repostaje, según se ha podido comprobar en las pruebas que acaba de realizar Airbus junto con la Luftwaffe.
Tal resultado positivo se ha puesto de manifiesto con un mensaje en la cuenta X de Airbus el pasado 13 de enero, acompañada de una foto de una ínfima calidad, en la que no se aprecian los títulos de las aeronaves, pero sí los referidos modelos.
La Luftwaffe aún no se ha pronunciado sobre esta información. En su página web recuerda que sus A400M fueron cualificados para reabastecer aviones de combate en vuelo en 2019, y que pretende hacer lo mismo con sus futuros helicópteros de transporte pesado Boeing CH-47F Chinook, con lo que se confirma que estarían dotados de percha de repostaje. (Julio Maíz)