¿Desea recibir notificaciones de www.defensa.com?
X
Sábado, 30 de noviembre de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

El Yakovlev Yak-130M, de reactor de adiestramiento a avión de combate multipropósito

Dos toneladas y media de armas aire-aire y aire-superficie le brindan un amplio potencial de combate para naciones de tipo medio. (Octavio Díez Cámara)
Dos toneladas y media de armas aire-aire y aire-superficie le brindan un amplio potencial de combate para naciones de tipo medio. (Octavio Díez Cámara)

El potente grupo aeronáutico ruso United Aircraft Corporation (UAC) sigue proponiendo soluciones para que las fuerzas aéreas puedan desarrollar sus cometidos de combate. Para países con presupuestos limitados, con capacidades de adiestramiento y mantenimiento no especialmente avanzadas, y con unas necesidades operativas de tipo medio proponen su novedoso avión de combate multipropósito Yakovlev Yak-130M.

Esta versión mejorada, que hemos podido observar en la feria Army 24, la han puesto a punto partiendo del reactor de adiestramiento biplaza Yak-130 que surgió de una colaboración de Rusia e Italia, está especialmente adaptada para realizar cometidos de adiestramiento avanzado y asumir misiones propias de cazabombarderos ligeros.

El birreactor en su versión Yak-130M surge de la Planta de Aviación de Irkutsk y es un verdadero avión de combate biplaza que puede asumir buena parte de los cometidos propios de los cazabombarderos y desarrollar un rol aire-superficie o el aire-aire.

Para este último, en el que el Yak-130M ha sido provisto con una cabina muy avanzada en la que destacan tres grandes pantallas multifunción, puede instalársele un avanzado radar con antena tipo AESA y que puede realizar tanto búsquedas aire-aire como el seguimiento de objetivos en la superficie de la tierra o del mar.

Dos reactores impulsan al Yak-130M y le permiten llevar una importante carga de armas y lanzarla en un radio de unos 750 kilómetros del punto de partida. (Octavio Díez Cámara)

Este aparato incorpora en las puntas de las alas dos misiles infrarrojos ligeros que, junto con otros dos más del mismo tipo bajo las alas, le permiten hacer frente a plataformas avanzadas y empeñarse tanto contra helicópteros o los ahora populares sistemas aéreos controlados a distancia (RPAS, Remotely Piloted Aerial System).

El Yak-130M ha sido mejorado en lo que son sus equipos internos o en los sistemas de comunicaciones. Puede instalarse en este avión de combate un contenedor con sensores electro-ópticos para el seguimiento de blancos de superficie y también una suite de guerra electrónica formada por un pod que capta emisiones y las interfiere y otro que lleva incorporados lanzadores de chaff que permiten a este avión ruso zafarse de diferentes amenazas.

Sobre las especificaciones técnicas, y con datos que nos ha proporcionado UAC, decir que el Yak-130M mide 11,49 metros, tiene una masa de despegue máxima de 10,29 toneladas o que sus dos turbinas propulsoras AI-222-25 le confieren un empuje de 5.000 kilogramos que le permite obtener una velocidad punta de 960 kilómetros/hora.

El gasto de combustible de este avión de combate es pequeño y su rango de acción supera los 1.600 km. Se le ha provisto de 9 puntos de fijación bajo las alas y el fuselaje en los que situar hasta 2,5 t de todo tipo de armas, lo que lo convierte en un avión de combate multipropósito capaz, avanzado y resolutivo. (Octavio Díez Cámara)


Copyright © Grupo Edefa S.A. defensa.com ISSN: 3045-5170. Prohibida la reproducción total o parcial de este artículo sin permiso y autorización previa por parte de la empresa editora.