En las últimas horas se desató otra crisis en el Estado Mayor de la Defensa uruguayo. Algunos coroneles, incluido el hasta ahora Jefe de Operaciones y Planes, Edgardo Púa, han pedido traslado a otras dependencias militares por roces, desavenencias-mutuas o jerárquicas- así como potenciales acusaciones de hostigamiento laboral, problemas respecto a ascenso de subalternos, discrepancias jerárquicas.
A ello se suma la citación a la Justicia Militar del jefe de la institución, Brigadier General Rodolfo Perera, indagado por, de acuerdo a denuncia del Cnel. Manuel Bautista, ex subordinado, de minimizar un posible robo menor de material lumínico, que le había sido reportado por el denunciante, antes arrestado y también conducido a juez militar imputado por su superior de insubordinación por su vehemente insistencia a este respecto.
Simultáneamente, ante otra severa interna en la Dirección de Inteligencia Estratégica, en inusual disputa casi pública por su nueva conducción (hasta ahora a cargo de coroneles, en el caso, completando su período, el Cnel. Raúl Moreno) el gobierno ha resuelto nominar en su máximo escalón a un oficial general, el Contralmirante Gustavo Luciani, Director de Personal de la Armada y, aparentemente, sin perjuicio de este cargo, mientras Ejército y Fuerza Aérea podrán nominar coroneles para secundarlo.
Además, el próximo ascenso propuesto para Brigadier Gral. del jefe de Estado Mayor General del Esmade, el Cnel. (Av,) Juan Méndez, ex director de la Escuela de Comando y Estado Mayor Aéreo y ex Jefe de Operaciones de la Unidad Aérea de la FAU en el Congo y del Escuadrón Aéreo No. 5 de helicópteros, va a desencadenar otros cambios cercanos.
Respecto a la Jefatura de Operaciones y Planes, el gobierno acaba de reglamentar sus funciones y atribuciones disponiendo que la misma la ocupe un general diplomado en Estado Mayor- eso aleja a la mayoría de los contralmirantes de la Armada, que no lo tienen-de ahora en adelante y, a propuesta del Poder Ejecutivo, sin perjuicio de las funciones que cumpla en su Fuerza de origen, con responsabilidad técnica en la conducción de sus contingentes a nivel táctico, con el concurso de oficiales especialistas en operaciones conjuntas y con curso de Estado Mayor, con el grado de Coronel o Capitán de Navío, designados por los Comandantes en Jefe de cada Fuerza, también si afectar su cargo original. Además, el nuevo jerarca podrá conformar un Estado Mayor Operacional.
Aparentemente, la primer nominación recaería en un alto oficial del Ejército. (Javier Bonilla)
