España lleva un tiempo ofertando a terceros países la posibilidad de que adquieran, a precios sumamente interesantes, distintos sistemas de armas, equipos, municiones… que ya no se requieren para la Defensa propia. Hace unos años, fue Uruguay la que, para su Ejército, adquirió nada menos que ciento veinte morteros ECIA (Esperanza y Compañía) de los que sesenta eran de tipo medio y 81 milímetros de calibre y otros tantos pesados y 120mm de calibre. La experiencia, concretada en 2015, ha llevado a los uruguayos a interesarse por un nuevo lote de material español que se ha declarado en condición de enajenable y forma parte de un catálogo que, a través de las vías administrativas oficiales, se ha ofertado a naciones amigas.
El mismo, que es amplio en lo que a opciones se refiere, se incluyen pistolas, fusiles de asalto, ametralladoras medias, municiones,…, y diferentes repuestos para mantenerlos operativos.
Buscando valorar lo que se les ofrece, ha estado en estos días en España una comisión del Ejército uruguayo encabezada por el coronel José Díaz , Inspector del Arma de Infantería, y que ha llegado con otros militares de alto rango. Han verificado el estado de lo que se les ofrece, demostrando un interés elevado por conseguirlos y dotar con ellos a las unidades de su Ejército. Por ejemplo, podrían optar por puestos de tiro MILAN y misiles, un sistema que ya tienen pero que se encontraría en un estado operativo muy limitado y requeriría el adecuado proceso de potenciación para mejorar la capacidad contracarro de sus unidades. Sabemos que hay interés por ambas partes y podría saberse en breve el alcance de lo que se acuerde transferirles.
En ese sentido hay que señalar que ha estado también otra comisión uruguaya en España. Estaba formada por personal de su Armada y lo que les ha traído a nuestro país es conocer de primera mano una propuesta en la que tienen un notable interés. Se trataría de un navío que podrían emplear en cometidos de patrulla de su Zona Marítima Exclusiva, una necesidad significativa a la que están buscando dar salida, como ha expresado en público recientemente su máximo responsable, desde hace un tiempo. Lo construyó una empresa viguesa para un determinado cliente y parece ser que al final no se ha concretado la acordada transferencia, por lo que estaría disponible y es nuevo.
Ambas acciones permitirían consolidar las buenas relaciones que en materias como la Defensa se tienen entre españoles y uruguayos, apostando porque opten por equipos a los que no se va a dar ya uso y paguen por ellos un precio que, seguramente, será casi simbólico. El acuerdo en el entorno terrestre podría incidir positivamente en que se concretase el que afecta al naval, obteniéndose así un beneficio mutuo. (Segundo Calpena)
Fotografías: Segundo Calpena.
·Uruguay ha ido renovando en los últimos años parte de su armamento con compras a varias naciones y sigue buscando nuevas armas.
·Los mercados internacionales ofrecen soluciones interesantes para renovar algunos de los sistemas de armas uruguayos.
·La Armada uruguaya está bajo mínimos y requiere naves modernas de forma especialmente urgente.