(defensa.com) Tras años de negociaciones, BAE Systems ha confirmado que ha llegado a un acuerdo con Riad para la venta de 72 Eurofighter Thypoon en un contrato que está valorado en unos 5.340 millones de euros. Desde que se lograse el primer acuerdo de Eurofighter con Arabia Saudí en 2007, las renegociaciones de las condiciones económicas del contrato han ido lastrando todo el proceso hasta este momento, al haber ido incrementándose, e incluso sabiendo que varias de las aeronaves ya han sido entregadas.
Además, el cierre definitivo de este contrato supone un fuerte balón de oxígeno para la industria de defensa británica, puesto que le permitirá mantener 5.000 puestos de trabajo, según especifica el Financial Times en su edición web. En el documento emitido por la compañía para confirmar le acuerdo, Ian King, director ejecutivo, indicó que el final de este largo proceso supone “un desenlace equitativo para ambas partes. Estoy encantado de que hayamos sido capaces de concluir estas negociaciones, que refuerzan nuestras relaciones con un cliente muy valorado”.
La noticia llega en una semana convulsa para la compañía británica y su participación en el proyecto del Eurofighter. Como ya ha adelantado defensa.com, Alemania habría decidido suspender un pedido de 37 aviones de combate, lo que dejaría el pedido alemán del caza europeo en 143 unidades. Además, BAE Systems presentó este pasado jueves el balance de los resultados de 2013, que comprenden un retroceso en los beneficios del 82,2%, lo que deja sus ganancias en 201 millones de euros. BAE explicó en el texto emitido para la Bolsa de Londres que las causas de este notable descenso se deben fundamentalmente a los recortes presupuestarios y a las complicadas condiciones del mercado.
El acuerdo total con Riad se consideraba fundamental desde el punto de vista estratégico para impulsar la venta del Eurofighter Thypoon en la Oriente Medio, y más después de conocerse a finales del año pasado que se habían abandonado las conversaciones con Emiratos Árabes Unidos para optar al contrato de aviones de combate. De esta manera, los siguientes objetivos podrían estar en los concursos de Malasia, Qatar o Bahrein, lo que se presenta fundamental para mantener la producción de estas aeronaves en las factorías europeas más allá del año 2018. (J.Martínez)