La Real Marina de Australia necesita dotarse de dos Buques de Apoyo Conjunto o Joint Support Ships (JSS), un programa llamado SEA2200, que pretende sean construidos localmente, uno de los requisitos principales de la licitación. Posibilitarán tanto las operaciones de transporte marítimo como las de reabastecimiento en misiones que actualmente ofrece el HMAS (His/Her Majestic Australian Ship) “Choules”, al que sustituirán.
Hasta el momento, la única empresa que ha hecho pública su oferta para hacerse con el programa SEA2200 es la británica BMT Group, que exhibió en la reciente feria Indo Pacific 2022, en Sidney, su diseño de buque logístico multi-role Ellida, basado en la experiencia obtenida tras liderar el programa de petroleros auxiliares de la clase Tide que operan en las filas de la Real Flota Auxiliar o Royal Fleet Auxiliary (RFA) británica y que, por costes, fueron construidos en los astilleros de Daewoo en Corea del Sur.
Además, el diseño cumple uno de los requisitos del SEA2200: contar con una gran cubierta de carga de vehículos y material rodante o roll-on roll-off (RoRo).
Pero uno de los problemas para cumplir con la construcción local, requisito del programa SEA2200, es que actualmente no hay un astillero en Australia capaz de construir navíos de gran tamaño, dado que desplazarían en torno a 24.000 toneladas. Anteriormente, todos los grandes buques de la Real Marina de Australia, incluidos los dos navíos de aprovisionamiento en combate o Auxiliary Oiler Replenishment (AOR) de la clase Supply y los de asalto anfibio/portaaviones o Landing Helicopter Dock (LHD) de la clase Canberra, se han construido en astilleros extranjeros, en concreto en los de la empresa española Navantia, en Ferrol.
No sería así descartable que la naval española, avalada por la buena experiencia de la Real Marina de Australia con los estos navíos, a través de su filial, creada en 2012, Navantia Australia, presentara su concepto de Buques de Apoyo Conjunto para hacerse con el programa SEA2200. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: El AOR “Supply” durante su construcción por parte de Navantia en Ferrol (foto Julio Maíz)