El pasado 30 de junio se clausuró el ciclo de mesas redondas sobre el sector espacial organizado por el Comité del Espacio del Instituto de la Ingeniería de España. Un ciclo dividido en cuatro mesas redondas que ha reunido a más de una veintena de panelistas expertos en espacio, a lo largo de dos jornadas, para debatir sobre la situación actual del sector espacial español y su posicionamiento industrial y científico en el entorno internacional y el New Space.
Entre sus conclusiones, los expertos coincidieron en valorar el anuncio de creación de una Agencia Espacial Española como un paso muy positivo para el sector pero no suficiente, ya que lo primero como paso previo y sin la cual no tiene sentido, sería que estuviera amparada por una Ley del Espacio, que le permita actuar con respaldo legislativo; debería ir acompañada de una Estrategia Espacial Española, elaborada por ese cuerpo técnico especializado, que indique hacia dónde tenemos que ir para lograr los objetivos más beneficiosos para todo el sector. Además, opinan que debería funcionar como autoridad única en dependencia directa de Presidencia del Gobierno, dotada de un cuerpo técnico especializado para que sea eficiente y capaz de coordinar los recursos disponibles y los
diferentes departamentos con competencias en espacio, controlando los retornos para el sector y con capacidad para actuar como interlocutor directo con las grandes agencias espaciales del mundo.
También valoraron las fortalezas del sector espacial español, que cuenta con más de cincuenta años de experiencia y con grandes instalaciones para el desarrollo de tecnología y para la investigación científica. Unas capacidades que le han permitido competir participando en muchas de las principales misiones espaciales internacionales, de la Unión Europea, de la ESA y desarrollar programas nacionales muy relevantes.
En cuanto al New Space, los expertos señalaron que es una gran oportunidad para España porque está suponiendo una democratización del acceso al espacio al permitir acceder a personas individuales y pequeñas empresas e instituciones, gracias a la reducción de costes y a una madurez más acelerada de las tecnologías debido a un ritmo de lanzamientos mucho más rápidos que permite probar y testear los nuevos desarrollos y reducir cada vez más el tamaño de los equipos y tecnologías utilizadas. También indicaron que para que España pueda competir en este ámbito es necesario que las empresas se especialicen e impulsar la convivencia y creación de sinergias entre actividades de Old y New Space.
También plantearon la oportunidad que supone para el sector espacial español participar en algunas de las áreas contempladas en el “Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia” presentado por el Gobierno para aprovechar los fondos europeos “Next Generation EU”, que movilizará 140.000 millones de euros hasta 2026.
En cuanto a las debilidades un tema preocupante para los expertos es la pérdida de competitividad de Europa en el ámbito internacional, que se puede observar en el bajo número de lanzamientos ya que en los últimos 6 meses ha hecho un solo lanzamiento, frente a Estados Unidos o China, que han realizado 25 y 18 lanzamientos, respectivamente, en ese mismo periodo de tiempo. Una situación que, en su opinión, también se agrava por el rápido desarrollo del New Space, que implica un modelo mucho más ágil y barato en el desarrollo de proyectos espaciales.
También se refirieron a la preocupante falta de regulación legislativa internacional a la hora de delimitar y unificar criterios sobre la explotación y utilización de los recursos en otros planetas y asteroides y sobre el uso del espacio extraterrestre. Para los expertos, debido al rápido desarrollo del New Space es necesario y urgente definir esta legislación internacional cuanto antes, para evitar situaciones de vacío legal como el que estamos viendo con megaproyectos como la constelación de satélites Starlink, que ayer anunciaba Elon Musk en el World Mobile Congress de Barcelona y que pretende literalmente “invadir” el espacio extraterrestre con 40.000 satélites sin que ninguna legislación internacional le ponga límites, además de los problemas de sostenibilidad que implican este tipo de megaproyectos.
En el ámbito científico, los expertos señalaron la importancia de que España sea capaz de desarrollar instrumentos innovadores y liderar misiones científicas, para lo cual es necesario retener el talento joven que tenemos porque si se van los que liderarán estos proyectos serán otros países. Porque es ese liderazgo el que mueve la inversión y la tecnología, y para impulsarlo hay que proponer cosas nuevas que respondan a preguntas claves de la ciencia.
Otras cuestiones de interés a las que se refirieron fueron la necesidad de que España se especialice en aquellas actividades en las que pueda ser más competitiva y destacar a nivel internacional; así como la necesidad de sensibilizar en mayor medida a la sociedad sobre la importancia del espacio en nuestras vidas, una labor en la que los medios de comunicación juegan un papel fundamental para lograr crear una mayor “cultura del espacio”, tal y como ocurre en otros países de nuestro entorno, para transmitir que el espacio es un sector básico, esencial y con alto potencial para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).