Las marinas de México y Francia están iniciando de un proceso para estrechar su cooperación militar e incrementar el intercambio de información y experiencias en temas de interés común, como el combate al narcotráfico y a la piratería en altamar. Este último es un fenómeno que también golpea en aguas mexicanas a través de actos de pillaje, ocupación plataformas petroleras y asalto a embarcaciones civiles que se mueven en la Sonda de Campeche, donde la Armada de México vigila más de 250 pozos y campos de explotación desde la plataforma antiterrorista Ixtoc-Alfa.
Mejorar la interoperabilidad de ambas fuerzas navales, cooperar en el combate al narco, a la piratería y a otros delitos que se cometen en las jurisdicciones de las marinas mexicana y francesa, son los punt0s centrales de lo que sería una primera agenda de acercamiento, señaló el capitán de Navío y comandante del buque portahelicópteros LHD-Tonnerre (L-9014), Ludovic Poitou. Tras arribar al muelle de la Marina-Armada de México en el puerto de Veracruz encabezando un contingente de 650 cadetes, oficiales y personal operativo del buque Tonnerre y de la fragata La Fayette, el capitán explicó en entrevista que uno de los objetivos específicos de este acercamiento es el de incrementar las experiencias de los cadetes de ambos países, quienes pronto se convertirán en los nuevos oficiales navales, para que lograr un mejor desempeño y conocimiento de las fuerzas de naciones amigas.
Capitán Ludovic Poitou, Comandante del LHD-Tonnerre
El capitán de Navío Poitou y el comandante de la fragata La Fayette (F-710), capitán de Fragata Pascal Forissier, sostendrán encuentros con sus pares mexicanos para ir construyendo una agenda de encuentros, ejercicios navales conjuntos e intercambio de personal en formación, así como jefes y oficiales para atender temas de interés común. De hecho, el primer paso concreto se dio el lunes 10 de junio, cuando la Patrulla Oceánica PO-153 Guanajuato, de la Armada de México, alcanzó en altamar al Tonnerre y a la fragata La Fayette para hacer maniobras Passex –formaciones y avance coordinados– en aguas del Caribe.
Este viernes, cuando el portahelicópteros y su escolta zarpen hacia costas estadunidenses, buques de la Marina de México se les unirán para otro ejercicio de navegación simultánea, indicaron los mandos franceses. Aspectos como el intercambio de experiencias y el apoyo en el combate al narcotráfico en altamar y estrategias contra la piratería están en la agenda de acercamiento que revisarán los representantes navales de México y Francia, añadió el comandante del portahelicópteros.
Lancha semirigida en ramopa de desembarco del Tonnerre
El LHD-Tonnerre ha atracado en el puerto de Veracruz junto con la fragata La Fayette, unidad escolta que acompaña en sus rutas al navío en el que cada año alrededor de 400 estudiantes de la Escuela Naval Francesa viajan de continente a continente para adquirir experiencia y probar sus habilidades en altamar.
En esta ocasión alrededor de 650 tripulantes de ambos buques –entre cadetes y oficiales– se encuentran en el puerto de Veracruz como parte de la operación Juana de Arco, que ha llevado al Tonnerre a las costas de Egipto, Sudáfrica, Madagascar, Mozambique, Brasil, Colombia y México, de donde zapará el 15 de junio hacia el puerto de Charleston, en Carolina del Sur (Estados Unidos).
Puente de mando del LHD-Tonnerre
Eso es lo que harán también en costas norteamericanas, desplegando formaciones y ejercicios anfibios con tropas de cada marina interactuando en buques del otro país. Luego, el portahelicópteros seguirá su ruta hacia Punta Delgada, en las Islas Azores. Desde ese lugar el Tonnerre regresará a Francia para completar cinco meses de navegación. Su llegada a Veracruz mantiene abiertas las puertas de una fructífera relación naval en la que México ha adquirido en los últimos años helicópteros Cougar, H-225, AS-565 Panther, lanchas flexibles y semirígidas Zodiac, armamento ligero, sistemas de detección y aeronaves de ala fija de la firma Airbus.
La visita del Tonnerre y de la fragata Lafayette, con sus cadetes de tercer año, tuvo como preámbulo la participación de los tripulantes franceses en acciones de combate a la piratería en el Océano Índico, de asistencia humanitaria en Mozambique tras la devastación por fenómenos naturales, de interdicción de narcóticos con la Marina de Brasil y de combate al terrorismo, con la Marina de Colombia.
Vehículos Masstech en una de las cubiertas del LHJD-Tonnerre
Con la Armada de México, además del encuentro cultural con otras naciones y de las experiencias marinas, se busca aportar conocimientos para reforzar acciones de lucha contra delitos que van en aumento en el mar, como la piratería y el tráfico de drogas.
El comandante de la fragata L-710 La Fayette, capitán Pascal Forisier, indicó que esta nave tiene una doble función, ya que es un buque escolta que brinda protección al portahelicópteros anfibio Tonnerre, sobre todo en zonas de riesgo, y además aporta conocimientos y experiencia a los cadetes en maniobras con el despliegue de las aeronaves y en situaciones de posible enfrentamiento con otro buque (piratería), en donde el control marítimo y la inspección son vitales para que las embarcaciones civiles puedan navegar en condiciones seguras. En el tema del combate al narcotráfico, los comandantes y oficiales franceses van a aportar sus experiencias en el rubro ya que también sufren este problema en la zona de las Antillas. (Jorge Alejandro Medellín, corresponsal de Grupo Edefa en México)