La infantería de marina estadounidense acabó el año pasado realizando pruebas con el Joint Air to Ground Missile (JAGM) contra objetivos terrestres y navales empleando sus helicópteros de ataque AH-1Z Viper. Así lo han informado recientemente, confirmando la realización de ejercicios durante los meses de noviembre y diciembre en la base de la Fuerza Aérea de Eglin en Florida y en la Estación Aérea de los Marines en Yuma, Arizona.
A comienzos del mes de noviembre se probó en Eglin la utilidad del JAGM para apoyar las bases expedicionarias avanzadas de los marines y conducir operaciones de negación del acceso al mar en el entorno litoral y operaciones de apoyo al control del mar. Posteriormente en diciembre, en Yuma, se realizó una prueba contra objetivos terrestres empleando la misma combinación de helicóptero y misil. Ambos ejercicios fueron organizados por el Escuadrón Operacional de Pruebas y Evaluaciones VMX-1.
El objetivo de ambas pruebas era valorar la mejora en la letalidad de los helicópteros de ataque Viper contra objetivos navales y terrestres dotados de este nuevo sistema de armas. Se realizaron lanzamientos contra objetivos blindados y ligeros desde diferentes distancias y en varios escenarios operativos cuyos resultados están siendo evaluados para mejorar las tácticas, técnicas y procedimientos de empleo de este nuevo misil tanto en operaciones de ataque como de apoyo aéreo próximo.
La Infantería de Marina estadounidense comenzó las pruebas con el JAGM desde el Viper en 2018, estando previsto que los lanzamientos realizados a finales del año pasado hubieran tenido lugar en 2019 para conseguir ese mismo año la capacidad operativa inicial (IOC) que aún no se ha alcanzado. En 2018 Lockheed Martin se adjudicó un contrato de producción de baja cadencia para comenzar la fabricación de estos misiles para el Ejército de Tierra y la Infantería de Marina estadounidenses.
Un misil para reemplazarlos a todos
El JAGM de Lockheed Martin es un misil de desarrollo conjunto entre al Ejército de Tierra y la Infantería de Marina estadounidense con el que se pretenden mejorar las prestaciones actuales del misil Hellfire pero permitiendo que todas las plataformas que operan actualmente este misil puedan emplear el nuevo JAGM. Está diseñado para destruir objetivos fijos o en movimiento y poder reasignar el objetivo ya durante la fase de vuelo. Deberá poder destruir objetivos blindados o ligeros tanto de día como de noche y en cualquier condición atmosférica incluso en condiciones complejas del campo de batalla como la presencia de contramedidas electrónicas.
El JAGM emplea un sistema de guiado multimodo que combina un sistema de guiado por Láser Semiactivo (SAL) y un radar de ondas milimétricas (MMW) para mejorar la capacidad de adquisición y seguimiento de objetivos en cualquier circunstancia. Cuenta también con una cabeza de combate polivalente capaz de penetrar blindajes reforzados, vehículos ligeros, edificios o buques ligeros. Tanto el Ejército de Tierra como la Marina y el Cuerpo de Marines pretenden sustituir con el JAGM sus misiles TOW, Hellfire y Maverick, habiendo recurrido en el caso de estos últimos a una mejora del sistema de guiado hasta la llegada del JAGM de la que ya informamos en 2014. (José Mª Navarro García)
Fotografías:
·Misiles JAGM en la semiala del AH-1Z (Infantería de Marina estadounidense)
·Personal del VMX-1 comprueba el lanzador M299 antes de montar el JAGM para las pruebas (Infantería de Marina estadounidense)