La Fuerza Aérea Boliviana (FAB) comunico brevemente que, por motivos que serán investigados por la Junta de Accidentes, se precipitó a tierra un avión de entrenamiento Hongdu K-8W Karakorum matrícula FAB-661 sin lamentar bajas en la tripulación, mientras realizaba una vuelo de instrucción.
Este es el segundo accidente con una aeronave de esta clase, de fabricación china y que presta servicio en el país del altiplano desde 2011 y operan desde la ciudad de Cochabamba.
En julio del pasado año fue la Aviación Militar Bolivariana de Venezuela quien perdía un K-8W Karakorum, operado por el Grupo Aéreo de Operaciones Especiales N° 15 (GAOE-15) “Furias”, uno de ellos sufrió un accidente en el transcurso de una misión de rutina en el sector de los Cortijos, municipio San Francisco, del estado noroccidental del Zulia, los pilotos lograron eyectarse. Era el cuarto aparato de este tipo siniestrado desde 2010 en Venezuela.
La Aviación Militar Bolivariana, que en 2021 adaptó el lanzacohetes LAU-32/A de 70 mm de la firma belga Fabrique Nationale Herstal en estos aparatos, despliega desde 2009 los Hongdu K-8W Karakorum, que operan desde el Grupo Aéreo de Caza Nº 12 “Grifos” y el Grupo Aéreo de Operaciones Especiales N° 15 “Furias” ubicado este último en la base aérea “General en Jefe Rafael Urdaneta” (BARU), en la ciudad de Maracaibo, estado Zulia. Además del lanzacohetes LAU-32 y del armamento original comprado a Nanchang Aircraft Manufacturing Corporation, los K-8W venezolanos emplean desde enero de 2017 las bombas estadounidenses de caída libre Mark 82 (Mk.82) de 500 lb.