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Viernes, 22 de noviembre de 2024 Iniciar Sesión Suscríbase

Lula acusado de tráfico de influencias en la compra de los Gripen, una “negociación irregular” según la fiscalía

El Ministerio Público Federal brasileño ha denunciado ante la Justicia al ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva por los delitos de tráfico de influencias, blanqueo de capitales y organización criminal  vinculadas a las "negociaciones irregulares que llevaron a la compra de 36 aviones de combate Gripen por parte del Gobierno brasileño y la extensión de los incentivos fiscales para algunos fabricantes de automóviles a través del Decreto 627 Provisional". La acusación también afecta el hijo del ex presidente, Luis Claudio Lula da Silva (que ahora vive en Uruguay) y a la pareja de lobbistas Mauro Marcondes y Cristina Mautoni.

La Oficina del Procurador General dice que los delitos fueron cometidos entre 2013 y 2015 cuando Lula, aprovechando su condición de influyente ex presidente "implementó un esquema que prometía interferir con el gobierno para beneficiar a las empresas MMC, Caoa (Hyundai Brasil, extendiendo exenciones impositivas o aduaneras) y al grupo SAAB, clientes de Marcondes y Mautoni Empreendimentos e Diplomacia LTDA (M&M)". A cambio, dice la denuncia, Mauro Marcondes y Cristina Mautoni, los propietarios de M&M, entregaron a Luis Claudio da Silva cerca de un millón de dólares.

En más de 154 páginas, los fiscales Heber Mesquita, Frederico Paiva y Anselmo Lopes describen la acción de los investigados en dos hechos a partir de la existencia de lo que llamaron una "relación triangular". Uno de los vértices lo forman los clientes de M&M, que aceptaron el pago de cifras millonarios  creyendo se mediaría en su favor ante el gobierno federal, otro vértice es el de los intermediarios (Mauro Marcondes y Cristina Mautoni y  el propio Lula) y en el tercero se sitúa el agente público que podría tomar decisiones que beneficiasen a la primera: la entonces presidente Dilma Roussef.

Fueron analizados documentos y testimonios anteriores del ex presidente Lula  y un representante de SAAB en Brasil, Bengt Janer. Entre las declaraciones hechas por un ejecutivo de Quadricon, empresa que, durante un período fue contratada por la compañía sueca, se afirmaba que  desde 2009 el proceso de compra de las aeronaves se hizo más político que técnico. Un Procedimiento de Investigación Criminal (PIC), establecido en la División de Lucha contra la Corrupción  del Ministerio Público Federal en Brasilia para investigar la compra de los cazas, sirvió también como base para la acción.

El fiscal sostiene que las promesas de interferencia en el gobierno de Rousseff del ex presidente Lula rindió a su hijo, Luis Claudio, la percepción de ventajas indebidas y  que la cantidad transferida de dinero no fue mayor debido a la aparición de la investigación. Respecto a las aeronaves, la acción del fiscal aporta una descripción detallada del proceso que duró ocho años. La licitación para la compra, considerada la mayor compra de aviones militares en América Latina,  el llamado Proyecto FX-2, fue iniciada en 2006. Sin embargo, recién en 2014, el gobierno brasileño firmó un acuerdo con la compañía SAAB para el suministro de aviones.

La compañía sueca tuvo como competidoras a Dassault (con el Rafale), que en 2009 llegó a ser anunciada como ganadora de la puja por el presidente Luiz Inacio Lula da Silva durante una visita del entonces mandatario francés Nicolás Sarkozy,  y a Boeing (Super Hornet), que durante algún tiempo (entre 2011 y mediados 2012), fue el grupo favorito de la presidenta Dilma Roussef. En declaraciones ofrecidas a la Corte, el representante de SAAB dijo que en este período la compañía creía que iba a ser superada ampliamanete por los estadounidenses. "Tiré la toalla", dijo Bengt Janer.

Lo que pasó, sin embargo, fue un nuevo impulso para la empresa sueca, que ya tenía un contrato indirecto con M&M (a través de Quadricon) y en agosto de 2012 se puso a trabajar directamente con los asesores brasileños. Las investigaciones revelaron que, globalmente, la agencia M&M recibió de SAAB 1,84 millones de €, de los cuales € 744.000 entre 2011 y 2015. Simultáneamente, la prensa brasileña, con la cual Saab era publicitariamente muy generosa, repetía hasta el cansancio las letanías de Edward Snowden y Julian Assange sobre interferencias  y grabaciones de conversaciones oficiales por parte de organismos estadounidenses, haciendo trizas las chances de Boeing.

Las retribuciones a los lobistas aumentaban. La explicación de este refuerzo en el pago es, de acuerdo con los investigadores, el hecho de que los mismos  habían ofrecido  a los suecos una gran  proximidad con el antiguo presidente y podría depender de su influencia con el gobierno asegurar una victoria en la licitación. La fiscalía también se refiere a un intenso intercambio de correos electrónicos entre los empleados de M&M y el Instituto Lula, para facilitar una reunión entre el ex mandatario y el líder socialdemócrata (futuro primer ministro), Stefan Lofve, durante los funerales de  Nélson Mandela.

Para los fiscales tampoco hay duda de que, al menos desde septiembre de 2012, Lula estaba al tanto de la estrategia utilizada por Mauro Marcondes (ofreciendo a SAAB, MMC y Caoa la idea de que los empresarios mantenían una fuerte relación de proximidad al ex presidente) y vio así, efectivamente, la oportunidad de asegurar el enriquecimiento de su hijo. Para ello, el ex presidente aprovechó el trabajo del personal del Instituto Lula  que, a través de enlaces telefónicos y de correo electrónico, filtraban las conversaciones se . "Así él  no firmaría ningún mensaje, y cualquier interesado en un contacto directo, tendría  que programar una reunión personal."

Además de los Saab Gripen NG, este grupo sueco vendió al Ejército Brasileño sus sistemas de misiles RBS (Robotik System) 70 Mark II e intentaba colocar en la Marina, al menos  dos barreminas. (Javier Bonilla)


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