Cazabombarderos rusos, una potencia de referencia en combate
Revista Defensa nº 490, febrero 2019
Eduardo Andújar, 6 de abril de 2019
La modernización de las aviaciones de combate latinoamericanas tiene como uno de sus pilares el mantenimiento de una gran disponibilidad operacional de sus aeronaves, con el fin de que sean capaces de despegar en todo momento para rechazar cualquier amenaza procedente del cielo.
Se pretenden aviones que hayan sido probados en condiciones de combate reales, que dispongan de una amplia gama de armamento, que ofrezcan elevadas prestaciones y, además, que sean fiables. de una amplia gama de medios de ataque aéreos, poseer altas prestaciones tácticas y técnicas y ser fiables. Y todo ello en un contexto en el que el parámetro coste-eficiencia es vital. Es precisamente ese concepto el que durante muchos años ha constituido uno de los factores clave de la elevada competitividad de los cazabombarderos de fabricación rusa a la hora de decidir sobre la selección de un sistema de armas de este tipo.
A diferencia de muchos países, Rusia presume de ofrecer a la vez los productos de dos marcas legendarias: Sukhoi y MiG. Entre los modelos que se ofrecen en los mercados de armamento, sus respectivos cazabombarderos Su-30MKI y MiG-29M/M2 poseen un gran potencial de exportación. Concebidos para destruir blancos aéreos, terrestres y navales de superficie, pueden operar de día y de noche, en todo tipo de condiciones meteorológicas y son muy resistentes a las contramedidas radioelectrónicas activas y pasivas.
Su arsenal está compuesto por misiles aire-aire y aire-superficie, incluyendo modelos supersónicos antirradar y antibuque, al igual que cohetes y bombas de aviación guiadas y clásicas. Las...
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