La Fuerza Aérea Mexicana (FAM) pondrá en marcha un nuevo esquema de vigilancia aérea y seguridad aeroespacial a partir de la creación de unidades especiales de reacción inmediata que actuarán con base en información recabada, analizada y difundida en tiempo real desde diversos frentes.
La información será recabada y analizada en dos centros de inteligencia que la recibirán de fuentes civiles y militares vinculadas al sistema aeronáutico nacional. Esto se complementará con datos surgidos de fuentes de inteligencia militar foráneas (Estados Unidos, Colombia, Brasil, Perú, Panamá, Guatemala).
En este proceso están involucrados 6 aviones, 8 helicópteros, 3 vehículos y 17 unidades terrestres de empleo táctico que operarán en el Sistema EDT (Enlace de Datos Tácticos), que involucra el control de las plataformas aéreas, de aeronaves interceptoras, de sistemas aéreos no tripulados, de radares civiles, de radares militares, de centros de control y cómputo, de centros de control regional, de una red de información aeronáutica civil.
Todo esto estará apoyado con unidades de despliegue inmediato que se desplazarán a los puntos de conflicto que requieran su intervención. El plan central de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) es “equipar con sistemas de comunicación a aeronaves, vehículos y personal, para permitir comunicación de voz, datos y video entre los participantes en una operación y un centro de mando, generando y difundiendo la situación táctica de una operación”.
¿Cuál es el material y equipo que estarán involucrados en esta nueva etapa de respuesta en las medidas de vigilancia estratégica e intervención? Inicialmente, el material aéreo está integrado por las tres plataformas Embraer-145 (dos EMB-145 MP/SA y un EMB-145 AEWC), por dos aviones King Air 350e y una aeronave no tripulada (RPAS - Remotely Piloted Aircraft System).
Este material aéreo estará enlazado al Sistema EDT, que a su vez recibirá información de los sistemas de radares del Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (SENEAM), del sistema de radares aéreos militares y de los Centros de Control Regional del Sureste y del Norte, manejados por la FAM. Estas entidades concentrarán la información en tres sistemas de bases de datos: Sistema AIS, Sistema AD5-B y el Sistema Intranet de la Sedena.
Los datos recabados en estos sistemas serán enviados al sistema central EDT (Enlace de Datos Tácticos), el cual controlará y administrará los niveles de respuesta que requiera cada caso y ordenará el despliegue de tropas, unidades, vehículos y aeronaves de apoyo necesarias.
Previo a la puesta en marcha de la nueva estrategia de vigilancia, detección e intervención de la Sedena, la FAM licitó el mantenimiento especializado de las tres plataformas EMB-145 para dotarlas paulatinamente de sistemas avanzados Erieye y Flir para potenciar sus capacidades. En junio de 2018 las plataformas Embraer fueron sometidas a mantenimiento mayor. El servicio incluyó la reparación y corrección de errores y desgaste en los sensores de los aparatos EMB-145 MCSA-AWEC, Matrícula 4101, y a los EMB-145 RS-MP, Matrículas 4111 y 4112.
Los sensores han cumplido ya más de 10 años de uso y su mantenimiento es urgente, se señalaba entonces en el documento en el que desde 2015 se visualizaba la atención mayor a las plataformas Embraer-145. De hecho, los tres aparatos EMB-145 cumplieron 15 años de haber llegado a la FAM y están recibiendo atención especializada a la que se sumará el C-26 Metroliner, aeronave de ala fija con la que se ha mantenido la operación del Sistema de Vigilancia Aérea (SIVA) de la Fuerza Aérea Mexicana.
El mantenimiento a los sensores en las plataformas de los EMB-145 es el más costoso al que se ha sometido a las aeronaves de la FAM, ya que significa una inversión de 4.752,7 millones de pesos (unos 224 millones de euros) que comenzó hace tres años y deberá concluir en 2020. El horizonte de vida útil de las tres plataformas con el mantenimiento concluido será de 10 años. De no haberse iniciado el servicio a los Embraer, su vida útil hubiera sido de tres años, señaló en 2018 la FAM. (Jorge Alejandro Medellín, México)