El programa de desarrollo de un nuevo vehículo de combate ligero para las tropas aerotransportadas del Ejército de Tierra alemán avanza con la materialización del sistema, denominado GSD LuWa (probablemente por Luftwaffenträger, portador de armas aerotransportado).
Se trata de un desarrollo que sustituirá a los característicos vehículos propulsados por cadenas Wiesel (comadreja) que acumulan 30 años de servicio y que comenzaron a ser modernizados en 2019. A pesar de este programa de modernización se contempla la necesidad de desarrollar un nuevo vehículo con un nivel de protección mayor, preparado para operar con los programas de digitalización del campo de batalla y con nuevos sistemas de armas.
El hito más importante tuvo lugar el pasado 22 de junio cuando el grupo la compañía de ingeniería alemana IABG (Industrieanlagen-Betriebsgesellschaft GmbH) presentó un demostrador del programa, iniciado por encargo de la Oficina Federal para el Equipamiento, Tecnologías de la Información y Apoyo en Servicio (BAAINBw) del Ejército alemán después de que en 2016 se comenzara con el análisis de los requisitos. Entre las compañías que participan en este programa están la citada IABG, ACS (Armoured Car Systems) que suministra el casco e integra los sistemas, FFG o la eslovena Valhalla Turrets que ha desarrollado una torre dotada de cañones de 25, 27 o 30 mm.
El vehículo se caracteriza por un tamaño compacto y dos orugas por cada lado, con tres ruedas de rodaje por cadena y ruedas tensoras y motrices en la parte superior. El motor se encuentra presumiblemente en la parte delantera con una cabina acristalada de gran tamaño con parabrisas independientes e inclinados lateralmente como en el vehículo de reconocimiento Fennek. En la parte superior se presenta una torre no tripulada de gran tamaño, con un bloque sensor en la parte frontal derecha, un cañón que podría tratarse del mismo BK 27 de 27 mm. empleado en el Eurofighter o en uno de 30x173 mm. como el Mk44, referente actual en el sector.
Una comadreja aerotransportada
El origen del Wiesel hay que buscarlo en la década de los setenta cuando el Bundeswehr decidió adoptar un vehículo ligero aerotransportable para sus unidades ligeras, sobre todo en misiones anticarro y de apoyo a unidades de paracaidistas o infantería ligera. Gracias a su pequeño tamaño y peso, este vehículo diseñado por Porsche, podía ser transportado a la eslinga de un helicóptero CH-53 y hasta cuatro caben en el interior de un avión de transporte como el C-130. Posteriormente se desarrollaría la versión Wiesel 2 de mayor tamaño, peso y capacidad de carga, dotada también de un motor más potente.
De los 343 Wiesel 1 que encargó el Bundeswehr en 1985 121 estaban configurados como anticarro, dotados de lanzamisiles TOW y 133 disponían de una torre monoplaza dotada de un cañón Rheinmetall Mk 20 Rh 2020 de 20 mm. En el caso del vehículo anticarro se reemplazará el TOW por el sistema Spike de Eurospike, denominado en el Ejército alemán MELLS, misil que probablemente dotará al GSD LuWa.
En 2019 la BAAINBw firmó un contrato con la compañía Flensburger Fahrzeugbau Gesellschaft (FFG, precisamente una de las compañías que trabaja en el LuWa) para modernizar la flota de vehículos blindados ligeros Wiesel 1.
El contrato, valorado en 73 millones de euros contempla la puesta al día de 181 vehículos y el suministro de 15 kits para convertir vehículos en servicio a una versión de formación de conductores. Las tareas se completarán previsiblemente en 2022 y permitirán ampliar la vida de estos vehículos más allá de 2030. Los trabajos se centrarán en la mejora del chasis, la protección balística y contra minas y la integración de modernos sistemas de comunicaciones y armas. En concreto se actuará sobre las tres versiones del Wiesel 1 en servicio como son la de reconocimiento, la anticarro y la de fuego de apoyo. (José Mª Navarro García)
Fotos:
Imagen conceptual que podría presentar el LuWa una vez completado (IABG)
Imagen de la presentación del demostrador del GSD LuWa el pasado 22 de junio (IABG)