La escala de buques de guerra de la Federación de Rusia en el Mar Caribe se ha incrementado en una proporción no vista desde la época de la Guerra Fría. Como muestra del fortalecimiento de su presencia en esas aguas y enmarcada en los acuerdos de cooperación estratégica de Rusia con Cuba y Venezuela, este martes arribaron al puerto venezolano de La Guaira los buques que integran el destacamento naval de la Flota del Mar Báltico de la Armada rusa para realizar una visita como la efectuada a La Habana entre el 27 y 30 de julio. Se suma a la realizada recientemente por una Fuerza de Tarea de la Flota del Norte rusa.
De acuerdo con lo señalado por la agencia de noticias rusa Sputnik, los navíos que integran esta fuerza naval son la fragata de misiles Neustrashimy (772) de la clase Proyecto 11540 Halcón, el buque de instrucción Smolniy (300) de la clase Proyecto 887 Smolniy y el buque petrolero de reabastecimiento Yelnya, de la clase Proyecto 160 Altay.
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Buque de instrucción Smolniy (300) de la clase Proyecto 887 Smolniy. (Foto: Armada Bolivariana)
Se espera que, durante su estancia en puerto venezolano, las tripulaciones de los buques de la Armada rusa participen en diversas actividades culturales “que simbolizan la cooperación naval entre las Armadas de Rusia y Venezuela, sino también la prueba de las relaciones amistosas y de confianza entre ambos estados”, señaló el contralmirante Oleg Gurinov, comandante del destacamento naval ruso.
Sólo en dos meses las Flotas del Mar del Norte y del Mar Báltico de la Armada rusa han desplegado en las aguas caribeñas un submarino nuclear de ataque, dos fragatas de misiles guiados, dos buques de reabastecimiento de flota, un buque de instrucción y un remolcador de salvamento, que a su vez a conllevado a un reforzamiento de las unidades navales y aéreas de patrulla que la OTAN tiene desplegadas en el Atlántico Norte y el Mar Caribe para monitorear la actividad de la Armada Rusa. (Douglas Bravo)
