La admisión al servicio de este primer portaaviones, diseñado y construido en China, se materializaba en una ceremonia el pasado día 17 de diciembre en la base naval Sanya, provincia (insular) de Hainan, presidida por el presidente Xi Jinping. El hecho de que el mandatario, que es también secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China y presidente de la Comisión Militar Central, encabezase el acto da buena idea de la importancia que se ha dado a este hito de potenciación del poder naval chino, que reunió a unos 5.000 militares.
Durante la entrega del “Shandong”, que luce en su caso el número 17 y bautizado así por la provincia oriental del mismo nombre, en la referida base naval en la ciudad costera, el presidente Jinping entregó la bandera de combate del navío militar al capitán de navío Lai Yijun, su primer comandante.
Con esta entrega, China ingresa en el restringido club de élite de las potencias mundiales que operan varios navíos de este tipo, tras los Estados Unidos y muy recientemente la Royal Navy británica, aunque otros países cuentan con los similares navíos de tipo LHD (Landing Helicopter Dock), como Francia e Italia no se les puede incluir.
Antes del martes, la Armada del Ejército Popular de Liberación tenía hasta la fecha un único portaaviones, el “Liaoning” (16), que originalmente era un navío sin finalizar ruso de la era soviética y que fue ampliamente modificado y terminado en el astillero de Dalian en la provincia de Liaoning. Entró en servicio en septiembre de 2012 y ha ejecutado varias maniobras y operaciones, principalmente en el Mar de China, junto con los navíos de escolta y apoyo que forman su grupo de batalla.
Durante la ceremonia de entrega, el presidente Xi inspeccionó el “Shandong”, que tenía trincados en su cubierta de vuelo varios aviones de combate Shenyang J-15, un desarrolló de la industria china del aparato de combate ruso Sukhoi Su-33. Este despliegue inicial de los aviones de combate en el nuevo portaaviones marca la diferencia con los inicios de las operaciones del “Liaoning”, que fue el navío que sirvió para desarrollar a lo largo de estos años la doctrina en lo que se considera el top de las operaciones aeronavales.
El “Shandong” es todo un hito en la pujante construcción naval militar china, ya que con sus en torno a 70.000 toneladas a plena carga es el más grande, poderoso y sofisticado buque de combate jamás desarrollado y fabricado en China. Su construcción comenzó en noviembre de 2013 en los astilleros Dalian Shipbuilding Industry, una subsidiaria de China State Shipbuilding Corp, que es el mayor constructor naval del mundo.
Se botó en abril de 2017 como informó defensa.com, realizó su primera prueba en el mar en mayo del año pasado, a las que se han sumado otras ocho, antes de ser comisionado a la Armada del Ejército Popular de Liberación .
En su última navegación en pruebas, tras zarpar del referido astillero de Dalian, con destino a Sanya, a mediados del mes pasado, navegó por el estrecho de Taiwán, cerca de esta isla donde se asientan los chinos capitalistas.
Tiene sistemas de propulsión convencionales y utiliza una rampa de tipo Skiyjump para lanzar los citados J-15, la punta de lanza del poder aéreo embarcado chino, aunque al igual que el “Liaoning”, el nuevo portaaviones también operará con una amplia gama de helicópteros. (Julio Maíz Sanz).
Fotografías:
·El nuevo portaaviones chino, durante el acto de entrega a la Armada del Ejército Popular de Liberación.
·Insignia del nuevo portaaviones “Shandong”.