Diversos medios se han hecho eco de las palabras del Vicealmirante Rob Kramer, Comandante de las Fuerzas Navales holandesas, en la publicación “Alle Hens“, en la cual señala que probablemente las dos fragatas “M” que opera Holanda serán traspasadas a Chile, la primera en 2024 y la otra el 2027, una vez que sus reemplazantes estén en servicio. Todo ello es producto de una Carta de Intención firmada con Chile durante EXPONAVAL 2018. Sin embargo las “M” no son la única alternativa que maneja actualmente Chile. Una interesante opción pareciera abrirse con las unidades de la Clase Adelaida que está retirando del servicio la Armada de Australia.
En el caso de las Adelaide, los contactos oficiales también datan de 2018, cuentan con el respaldo del gobierno y el interés de Chile queda demostrado por la comisión de oficiales que viajará a Australia en marzo o abril para navegar en una de las fragatas. Por otro lado estos buques estarán disponibles mucho antes, pues dos de sus remplazantes de la clase Hobart ya están en servicio y el tercero próximo a ser incorporado. Anteriormente se había dado a conocer el interés de Polonia de adquirir dos de esos buques, todo lo cual quedó en nada aproximadamente en agosto de 2018. De acuerdo a medios de prensa polacos la operación alcanzaba los US$ 550 millones aproximadamente. Otro interesado es Grecia, país que a fines de 2018, a través de su entonces Jefe de Estado Mayor de la Defensa Nacional y a contar de enero pasado Ministro de Defensa, Almirante Evangelos Apostolakis, manifestó que estos buques podían ser parte de la solución del problema naval griego. La publicación Australian Defence Magazine ha informado que voceros oficiales del Ministerio de Defensa de Australia han reconocido el interés manifestado por Grecia y por otros países a los cuales no nombra.
Las unidades australianas disponibles son tres fragatas, equivalentes a las Oliver Hazard Perry, denominadas HMAS Darwin, en servicio entre 1984 y fines de 2017; HMAS Melbourne, en servicio desde 1992 y HMAS Newcastle en servicio desde 1993. Para Chile estos buques representarían la incorporación de los misiles SM-2 Block III A y ESSM, este último operado desde un lanzador Mk-41 VLS. Un largo programa de modernización mejoró las capacidades de Mando y Control, vigilancia, guerra antisubmarina, entrenamiento a bordo y en tierra. El casco, y las unidades generadoras y de convertidores sólo fueron modernizados en el HMAS Darwin. Dos turbinas GE LM 2500 forman la planta propulsora que le permite alcanzar hasta 29 nudos. Posee cubierta de vuelo y hangar para dos helicópteros S-70B-2 Sea Hawk.
Las fragatas australianas permitirían dar de baja las Tipo “L” que cuentan con SM-1 y Sea Sparrow, modernizando la defensa antiaérea al incorporar SM-2 Block III A y ESSM. La propulsión también se vería beneficiada pues las dos turbinas Rolls Royce Tyne RM1C y las dos Olympus TM3B de las “L” serian sustituidas por dos turbinas General Electric LM2500. Dada las diferencias en los plazos, nada impide que las fragatas “M” sigan siendo consideradas por Chile en su programa de reemplazo, el cual no descarta la construcción de buques en el país. (Roberto Sandoval Santana, corresponsal de Grupo Edefa en Chile)
Fotografía: HMAS Melbourne lanzando SM 2 durante RIMPAC 2018. (Foto Royal Australian Navy)
·HMAS Newcastle en aguas del medio oriente como parte de la Operación MANITOU