En la tercera jornada de lanzamientos de agua sobre las zonas afectadas por los incendios forestales que asolan la zona centro sur de Chile, un Airbus C295 Persuader del Escuadrón de Exploración Marítima VP-1 de la Armada de Chile ha guiado al Boeing 747 Global SuperTanker , como previamente hiciera un CASA CN235 de la Brigada de Aviación del Ejército de Chile. El P-295, en su nomenclatura local, diseñado para guerra antisubmarina, ha probado su eficacia en esta misión, siendo clave en su desempeño su torre optrónica estabilizada, dotada de distintos sensores, entre ellos una cámara FLIR que permite detectar las diferencias de calor, información que los técnicos navales de la Armada transmitieron a los tripulantes del SuperTanker para determinar las áreas sobre las que llevar a cabo los lanzamientos de agua.
La operación refleja la capacidad de reacción y las posibilidades de una aeronave que, concebida inicialmente para otro tipo de misiones, ha prestado un apoyo decisivo en la situación de emergencia que atraviesa el país.