Cada 18 de mayo el país y en especial el Ejército de Chile, conmemora con solemnidad el “Día del Soldado Conscripto”, como una forma de reconocer y destacar la labor que realizan miles de jóvenes que cumplen con su Servicio Militar en las distintas unidades, desde Putre en el Altiplano chileno, hasta Porvenir en la Isla Grande de Tierra del Fuego.
En este día también, recordamos con profundo recogimiento y rendimos un sentido homenaje a los 45 camaradas que en mayo de 2005 fallecieron en los faldeos del Volcán Antuco y de manera particular a los 44 jóvenes soldados que cumplían con su servicio militar en esa oportunidad, por este motivo para el Ejército, el 18 de mayo es un día significativo y de reflexión, ya que conmemora a los 45 camaradas caídos en el cumplimiento del deber. Por lo tanto, año a año en el Destacamento de Montaña Nº17 “Los Ángeles” y en el memorial en honor a los caídos, se recuerda esta tragedia en compañía de los familiares, ex soldados y los integrantes de la Institución.
El servicio militar es un servicio vocacional, que constituye una de las formas en que el país mantiene una fuerza preparada para cumplir con las misiones que mandata la Constitución y las leyes de la República, en resguardo de la soberanía e integridad territorial, preservación de la paz y cuando la emergencia y catástrofes naturales afectan a la ciudadanía, ejemplo de esto, es el apoyo que nuestros soldados conscriptos del Regimiento Nº 10 “Pudeto”, realizaron en el desborde del rio “Las Minas”, apoyo a otras regiones en las reconstrucciones después del terremoto del 27 de febrero del 2010 o durante el actual Estado de Emergencia Constitucional en las distintas actividades de apoyo a la comunidad a causa del COVID-19. Por estos motivos, el soldado conscripto es un pilar fundamental para el cumplimiento de las misiones, en cautela de los intereses nacionales.
La preparación que reciben los soldados conscriptos para servir al país, en las filas del Ejército, además, de complementar la formación valórica recibida en el seno de sus hogares, entrega conocimientos, instrucción, entrenamiento y capacitación, que junto con permitirle desempeñar sus funciones, les ofrece una oportunidad cierta de desarrollar una carrera militar en la institución, ya sea, como Soldado de Tropa Profesional o postulando a las Escuelas Matrices. Este proceso de formación tiene como componente insustituible el estricto respeto de la dignidad de cada persona, al comportamiento alejado de cualquier forma de abuso y discriminación arbitraria, así como el firme compromiso con la indispensable disciplina.
Para finalizar, quiero mencionar que el país y en especial, el Ejército de Chile junto al Regimiento Nº 10 “Pudeto”, reconocen y agradecen a todos los Soldados Conscriptos, por el cariño, abnegación, entrega y compromiso, con que día a día asumen su tarea de servir a Chile y a los chilenos, que reiteramos el compromiso permanente de velar por quienes son parte fundamental del patrimonio más importante con que cuenta; los hombres y mujeres que integran sus filas. (Coronel Jorge Labarca Cid, Comandante del Regimiento Nº 10 “Pudeto”)
