Con la entrega del buque de asalto anfibio “Triestre” a la Marina Militar de Italia, el mayor construido en el país desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, se pone de manifiesto la continuada decisión de impulsar a esta fuerza naval de la OTAN.
El pasado 7 de diciembre se entregaba a la Marine Militare italiana su nuevo navío de asalto anfibio o LHD (Landing Helicopter Dock) “Trieste”, el mayor de los buques militares construidos en Italia desde los acorazados de la época previa y durante la Segunda Guerra Mundial. La ceremonia de entrega, que tuvo lugar en el puerto de Livorno, estuvo encabezada por el presidente de la República, Sergio Mattarella, cuya hija amadrino el navío, al que acompañaron el ministro de Defensa Guido Crosetto, el Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas italianas, el general Luciano Antonio Portolano, y el máximo responsable de la Marina Militare, el almirante Enrico Credendino.
El nuevo LHD de última generación fue entregado oficialmente en el marco de la ceremonia del juramento de lealtad a la República Italiana de 150 cadetes de la Academia Naval, en Livorno, que se realizó a bordo del navío.
El “Trieste”, construido por la empresa naval Fincantieri en los astilleros de Castellammare di Stabia y Muggiano, representa la culminación de un proyecto iniciado hace casi 14 años para reemplazar al portaaviones “Giuseppe Garibaldi”, que se dio de baja el pasado 30 de octubre, tras entrar en servicio en 1985.
Imagen a vista de pájaro del LHD “Trieste, en la que se aprecia su gran cubierta de vuelo. (Foto Marina Militare italiana)
El mayor buque desde la Segunda Guerra Mundial
Con 245 metros de eslora y un desplazamiento de 37.500 toneladas, el “Trieste” es el buque más grande entregado a la Marina Militar de Italia desde la Segunda Guerra Mundial, que fue cuando se incorporaron a su predecesor, la Regia Marina, los acorazados de la clase Littorio, que desplazaban más de 45.000 toneladas. El nuevo buque de la MM, presenta una estructura de doble isla, similar a la adoptada por los portaaviones de la Royal Navy británica “Queen Elizabeth”.
Con alojamiento para más de 1.000 efectivos, una cubierta de vuelo de 230 metros y capacidad para apoyar y proyectar un batallón anfibio de 600 tropas, el “Trieste” está diseñado para manejar un amplio espectro de operaciones. Su cubierta de garaje proporciona 1.200 metros lineales de espacio para vehículos con ruedas y orugas, tanto civiles como militares.
El buque de guerra es una Unidad Anfibia Multifunción, que proporciona una base móvil para operaciones de desembarco y proyección de una fuerza anfibia en zonas de crisis. Su dique interno inundable permite el despliegue sin problemas de fuerzas significativas en cualquier entorno operativo. Más allá de las tareas militares, su versatilidad operativa le permite adaptarse a emergencias humanitarias, lo que lo convierte en una herramienta vital para la respuesta a desastres.
Entrega de la bandera al navío por parte de Laura Mattarella, hija del presidente de Italia, que al ser éste viudo, hace las funciones de primera dama. (Foto Marina Militare italiana)
Como buque insignia del Grupo de Tareas Anfibio o ATG (Amphibious Task Group), el “Trieste” complementa al Grupo de Ataque de Portaaviones o CSG (Carrier Strike Group) liderado por el “Cavour” dentro de la Fuerza de Tareas Expedicionarias ETF (Expeditionary Task Force), el brazo operativo de la flota naval italiana. Este posicionamiento estratégico, de contar con dos navíos con capacidad de portaviones, subraya la capacidad de Italia para proyectar y garantizar la seguridad marítima tanto en el escenario nacional como internacional, por lo que duplica la capacidad, por ejemplo, de España, que sólo cuenta con un LHD, el “Juan Carlos I”, que desplaza 23.000 toneladas.
Otra de las capacidades que tiene el “Trieste”, al igual al “Cavour”, es la de operar a bordo, además de con distintos tipos de helicópteros y convertiplanos como el MV-22, con los nuevos aviones de combate Lockheed Martin F-35B, que es la versión con capacidad de despegue en corto y aterrizaje vertical o STOVL (Short Take Off Vertical Landing), con los que, a diferencia de España, ya están plenamente sustituyendo los veteranos Boeing AV-8B+ Harrier II. (Julio Maíz)