La invasión rusa de Ucrania ha cambiado la percepción que se tenía de la amenaza y de una posibilidad de conflicto. Se van a necesitar muchos más carros de combate modernos y en Alemania, de la mano de Rheinmetall, se perfila ya el sustituto natural de los Leopard 2 con una apuesta novedosa y tecnológica a la que se ha designado KF51 Panther, nombre que ya ostentó el Panzerkampfwagen V, que está considerado como el más letal de su tipo durante la II Guerra Mundial. La posibilidad de que acontezca algo similar es actualmente mucho mayor de la que era hace sólo un par de años.
La necesidad de contrarrestar la amenaza del Pacto de Varsovia, que surgió como consecuencia de un tratado rubricado en 1955, llevó a Alemania, ahora hace más de seis décadas, a diseñar y fabricar los Leopard. Esos carros de combate, primero el modelo 1 y, posteriormente, el 2, han sido el pilar ofensivo terrestre germano hasta el final de la Guerra Fría, cambio situacional que relegó su uso y redujo su número a cifras casi ridículas, si las comparamos con las propias de los años ochenta del siglo pasado.
Las potencias de Occidente actúan diligentemente, con tiento y tino en el aspecto político, una filosofía consensuada que queda clara y debe reforzarse con sistemas militares que generen un elevado nivel de disuasión ante potenciales amenazas ya definidas y otras más que puedan surgir en las próximas décadas. El carro de combate, o MBT (Main Battle Tank) sigue siendo hoy, por su potencia de fuego, contundencia y versatilidad, una pieza angular de cualquier enfrentamiento convencional o asimétrico y Rheinmetall apuesta con su KF51 Panther para, con un modelo que internamente califican de apéndice depredador, estar en la mejor disposición ante pedidos que puedan llegar desde los países europeos y desde otros lugares.
Operan desde estaciones de concepción similar 3 de los 4 tripulantes, en las que se opta por una total digitalización y la máxima información (foto Rheinmetall).
Un proyecto alemán privado
La aparición de un nuevo modelo de carro de combate no es habitual. En el caso que nos ocupa surge a mediados de la década pasada y por iniciativa privada, en un momento en el que hay varios modelos punteros que aparecieron hace ya varias décadas y van a requerir un pronto reemplazo. Para conocer más detalles sobre su gestación y la evolución que se ha materializado hasta la fecha fuimos invitados a Alemania a una intensa presentación de Rheinmetall en la que Alexander Kuhrt nos explicó numerosos detalles del concepto. Tobias Schmidt desarrolló todo lo relativo al armamento y munición, y Christoph Meyer relató la apuesta por sensores especialmente avanzados.
Todo comenzó -nos explicaron- con un análisis exhaustivo sobre el actual mercado, que reflejó de forma clara que el número de los MBT que hayen servicio ha ido reduciéndose de forma considerable y que los costes de mantenimiento de las flotas y el peso de los vehículos han sufrido un incremento sustancial frente a los de la anterior generación.
Rheinmetall tiene claro los valores que en cuanto a letalidad, supervivencia, capacidad de reconocimiento aporta el uso operacional de los modernos carros de combate. Por ese motivo, hace unos pocos años comenzaron a trabajar en un concepto de combate colaborativo que aplicarían a un novedoso diseño, que sumaría capacidades como dominar y destruir, actuar y reaccionar, o detectar e identificar.
Su voluntad era aportar novedades en relación con el despliegue de sistemas aéreos controlados a distancia, o UAS (Unmmaned Aerial System) para acciones de reconocimiento más efectivo; actuar como medio de defensa aérea frente al empleo generalizado de los UAV (Unmmaned Aerial Vehicle) por parte de potenciales adversarios, al poder disparar su arma principal con un mayor ángulo de elevación; contribuir con sistemas de armas de largo alcance del tipo NLOS (Non line Of Sight) que son capaces de volar hacia objetivos localizados a medio centenar de kilómetro; o llevar a cabo cometidos coordinados de vigilancia y adquisición propios del entorno ISTAR (Intelligence, Surveillance, Target Acquisition and Reconnaissance) de inteligencia, vigilancia, designación de blancos y reconocimiento.
La suma de esas aportaciones a las clásicas que encontramos en los carros de combate no acaba ahí. En el KF51 Panther se aborda ir un paso más allá en cuanto a sus cualidades, de forma que también se opta por un cañón principal capaz de conseguir más letalidad y mayor alcance; incorporar un concepto de supervivencia integral de los tripulantes y del propio vehículo ante las amenazas cada vez más variadas que podrá encontrarse en el devenir de sus misiones en los distintos escenarios de la batalla; o apostar por novedades tecnológicas como la fusión de datos([1]) de forma que los que en él viajen tengan, gracias a una apuesta por la digitalización integral, una mejor percepción de lo que acontece a su alrededor y puedan reaccionar para neutralizar sus objetivos.
Después de varios años de desarrollo, el KF51 podría entrar en producción pronto, de forma que las primeras entregas se materialicen a mediados de década (foto Rheinmetall).
En esa línea de esfuerzo comenzaron a definir detalles de su objetivo y elaboran un primer prototipo, en el que han incorporado elementos como el tren de rodaje o el grupo motopropulsor de las últimas versiones del Leopard 2. en las que Rheinmetall trabaja junto a Krauss Maffei Wegmann. Son detalles que hacen que las imágenes del nuevo carro de combate KF51 recuerden bastante al modelo que pretende reemplazar, aunque se nos explicó que, al ser el Panther un sistema en desarrollo, puede ir evolucionando y variando a la par de que se finalice el exigente proceso de experimentación que permitirá, previsiblemente sobre 2026([2]), avanzar ya hacia su fabricación en serie, en lo que sería una variante inicial, a la que se añadirán en las próximas décadas nuevos avances y mejoras.
A día de hoy, y tras proceder a su presentación internacional en el Salón parisino de Eurosatory en junio de 2022, se trabaja con un concepto del que conocemos datos genéricos precisos: masa total de 59 ton,, velocidad punta de 70 km/h. hacia delante y 30 hacia atrás([3]), autonomía superior a los 500 km, aceleración de 0 a 40 km/h. en 8 seg., capacidad de vadeo sin preparación de 1,2 m., superación de pendientes transversales del 30 por ciento y longitudinales del 60 y potencial para afrontar zanjas de 2,5 m. sin detener su marcha.
El cambio conceptual del KF51 Panther
Algunos de esos aspectos definen un ingenio de combate que poco tiene que ver con aquellos a los que hasta ahora estábamos acostumbrados a ver, pues se intenta dar un doble paso de avance en lo que se refiere al concepto que define a los carros de combate. Rheinmetall ha previsto que su Panther aporte novedades sustanciales, que les vamos a explicar, en aspectos como la potencia de fuego o la protección, sin olvidar la movilidad.
Respecto de la primera, señalaremos que hay varios elementos que sustentan la voluntad de obtener un nivel de letalidad superior: cañón de combate principal L52 de 130 mm. asociado a un cargador automático y a sistemas de puntería para el tirador y el comandante, ametralladora pesada coaxial de 12,70x99, torreta tele operada RCWS (Remotely Controlled Weapon System) Natter para distintos tipos de ametralladoras o lanzagranadas automáticos de 40 mm, y lanzador para disparar municiones merodeadoras UVision Hero-120.
El frontal del “Panther” está protegido frente a amenazas especialmente contundentes que puedan venir desde tierra o desde el aire (foto Rheinmetall).
Sobre la pieza que da al Panther buena parte de su diferencia respecto a la de generaciones anteriores, fitrmod que comenzó a gestarse en 2015 con el apelativo de FGS (Future Gun System). Apuesta por proyectiles nuevos multipropósito y cinéticos, que obtendrán un alcance efectivo superior a los 1.500 m. frente a objetivos de tipo similar([4]), podrá conformarse en distintas variantes en cuanto a su sistema de carga y retroceso para hacerlo más modular y será lo suficientemente preciso para impactos directos a más de 3,5 km., en los que podría conseguir perforaciones de 1 m. de acero de blindaje. Se han realizado más de 300 disparos de pruebas para validar detalles como el peso de unos 30 kg. de las municiones, la velocidad inicial de los proyectiles de unos 1.800-1.900 m/seg., que propugna más energía al salir de la boca de fuego, o la precisión inherente al tubo, que permite una dispersión de sólo 30 cm. realizando 4 disparos a 1 km.
El cañón L52, que en noviembre de 2022 realizó sus primeros disparos desde la plataforma KF51, trabaja asociado a un sistema automatizado de estiba y carga formado por 2 almacenes redundantes para un total de 20 municiones y un elemento central para moverlas hacia la recámara, acción que se busca que se realice en sólo 3 seg. -2,6 m. separan la ubicación de la munición del punto en el que se activa el disparo- y sólo se requieran de 9 más para expulsar el casquillo e introducir otro para una segunda acción de fuego consecutiva. La recarga del almacén la hacen 2 hombres de forma manual munición a munición, aunque si el cliente lo solicita podría optarse por una disposición que facilite la recarga de módulos completos con 10 de ellas, ya estibadas en su interior.
La potencia letal se complementa con la ametralladora pesada coaxial, que, gracias a sus funciones automatizadas permite batir distintos tipos de blancos a distancias de unos 1.000 m y dispone de nada menos que 1.250 municiones, con la torre Natter que pesa menos de 100 kg. y es controlada desde el interior para no exponer a quien la dispara, con el lanzador AMP (Advanced Mission Pod) para 4 sistemas Hero-120 para cometidos de ataque -cabeza de combate tipo AT o MP- o reconocimiento o 2 misiles de tipo NLOS, y hasta con un pedestal HEL (High Energy Laser) de entre 4 y 10 kW, panoplia que sitúa al Panther en un punto óptimo para enfrentarse en duelos con otros carros de combate, para actuar contra UAV y municiones merodeadoras o contra distintos objetivos fijos y móviles en un campo de batalla futuro más exigente.
Supervivencia
Si lo expuesto en cuanto a potencia de fuego es novedoso, no se queda atrás su apuesta de supervivencia integral para lograr la mejor protección de tripulantes y vehículo. Han definido el concepto SODS (Sense, Obscure, Defeat, Survive) que apuesta por una detección y localización precoz de la amenaza con alertadores láser y de fogonazos, por dificultar su ubicación gracias a lanzadores ROSY de humo multiespectral, que dificultan el funcionamiento del sistema de guiado de distintas armas, por neutralizar proyectiles CE/ATGM([5]) y KE que se aproximen con un sistema de protección activa ADS (Active Defense System) de 3ª generación, que incluye el equipo TAPS (Top Attack Protection System), que defiende la parte cenital hasta a 30 m. de altura, o por contar con elementos de blindaje híbrido polivalentes y reactivos resistentes a proyectiles penetradores de 125 mm.
Se opta por un diseño contenido que no llegue a las 60 ton. y pueda moverse por todo tipo de escenarios rurales o urbanos (foto Rheinmetall).
Si se solicita, se puede añadir también una mejor protección inferior antiminas. Por cierto, para mejorar la supervivencia del personal militar, no hay municiones estibadas dentro del chasis, ni en la ubicación de los tripulantes. Complementariamente, y en cuanto a la movilidad, podemos destacar que en el Panther de Rheinmetall su tren de rodaje y grupo motopropulsor suponen, si los asociamos también a los depósitos de combustible, un total del 36 por ciento de la masa total, una aportación fiable para moverlo sin restricciones y mantener el peso del conjunto, dentro del objetivo que sea un modelo de la clase MLC50 que pueda moverse bien por puentes y túneles propios de las vías de comunicación convencionales y ser llevado en góndolas o en trenes normales.
Como apunte final de este modelo de MBT, señalamos que no acaban ahí sus ventajas tecnológicas, pues se apuesta, dentro de un concepto multidominio, por un gran nivel de automatización, en el que resultan beneficiosos aspectos como una total integración digital, que lo convierte en un sistema killer-killer.
Para lograrlo, incorpora elementos como los sensores SEOSS 400 y 6 módulos SAS([6]) de cámaras -diurna e infrarroja con conjunto de proceso de vídeo-, que dan a sus tripulantes una percepción panorámica total de 360º de cobertura, el conjunto ATTAC (Automated Target Acquisition, Classification, Tracking & Attack) para responder a las distintas amenazas; el sistema de control de fuego totalmente digital, que permite apuntar cualquier arma en cualquier circunstancia y es fácil de usar en situaciones de estrés elevado, o detalles como el elemento de mando y control C4I, que combina el BMS (Battle Management Systems) y las comunicaciones -con antenas de las radios([7]) externas e integradas en la torre y la barcaza-, de forma que se puede interactuar mejor con otras plataformas para compartir información.
La suma de todo lo reseñado, junto con notables avances de integración entre los tripulantes y los distintos sistemas o el uso de un equipo de diagnóstico y monitorización digital asociado al conocimiento del estado real de la plataforma, hacen que el carro de combate KF51 se perciba como una apuesta segura, que ya ha comenzado a generar atención entre potenciales usuarios europeos e internacionales.(Octavio Díez Cámara)
[1] La fusión se enmarca dentro de una arquitectura que se conoce como NVGA (NATO Generic Vehicle Architecture).
[2] Es la fecha en la que se prevé haber finalizado el desarrollo de arma, cargador y munición.
[3] Podrían mejorarse esos ratios si se incorpora un motor de 1.800 CV.
[4] El alcance efectivo de los de 120 mm. se estima en 1.000 m.
[5] Anti Tank Guided Missile (misil guiado contracarro).
[6] Cámaras dobles asociadas a un equipo de seguimiento y reconocimiento de inteligencia artificial permiten ver a través del blindaje.
[7] Alta frecuencia HF (High Frequency) y muy alta frecuencia VHF (Very High Frequency).