Las claves de la elección de la XM17 de SIG-Sauer por el US Army
Octavio Díez Cámara, 31 de enero de 2017
La decisión del Ejército de los Estados Unidos sobre la nueva pistola que van a adquirir a partir de 2018 supone un cambio sustancial y tecnológico respecto del concepto que ahora tienen en servicio y el reforzamiento de conceptos ya asentados. Tanto el U.S.Army, como otros servicios de las Fuerzas Armadas estadounidenses, decidieron a mediados de la pasada década de los ochenta adquirir la pistola Beretta M92 del 9x19mm Parabellum -M9 en el entorno militar- como reemplazo de la M1911 del .45 ACP que venían usando. Ergonomía anticuada, tamaño grande, problemas de fiabilidad, concepción para nada modular,…, fueron, entre otros, los aspectos que llevaron a la Fuerza Aérea y al Ejército a afrontar su substitución por un nuevo modelo, proceso que se hizo acompañado de compras de pequeños lotes de las austriacas Glock 19 o de actualizadas M1911.
El calibre de la italiana, estandarizado en el ámbito de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) tuvo muchos detractores al principio, grupo que creció al presentarse problemas de fiabilidad en los cargadores cuando la M9 operó en Kuwait durante la Operación Desert Storm. Con el paso del tiempo se fueron solucionando y ha venido desempeñando su objetivo en escenarios tan complejos como el afgano. La decisión final sobre su sustitución se fue, por motivos de lo más diverso, dilatando y al final, en 2015 y por las prisas que parecía tener el cliente principal, que sería el Ejército, surgió el programa impulsor de la por ahora llamada XM17 -X por...
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