Ángel Recamán, director del Centro Tecnológico de Navantia, ha dado importantes claves de los pasos que la empresa pública está dando para adaptarse al futuro en el campo de la construcción naval. Publicado en la sección de opinión de la Voz de Galicia, el directivo de Navantia expone en un artículo el camino que se está recorriendo para adaptarse a los retos de incorporar las más modernas formas organizativas y técnicas de construcción naval.
Recamán expone así que “Navantia ha concluido recientemente la etapa de estudio y análisis del concepto Industria 4.0 para su adaptación a la construcción naval como Astillero 4.0….. A partir de este momento va a comenzar la fase de implementación del mismo mediante la realización de proyectos reales,….con el foco puesto especialmente en las fragatas F110”, de las que se construirán cinco para la Armada española.
Entre las líneas maestras destaca como elementos vertebradores “la digitalización, como motor tecnológico en todos los ámbitos de su actividad, y la colaboración, como herramienta para aunar los esfuerzos necesarios de todas las partes implicadas”.
Así mismo, como principal referencia se estaría contemplando el modelo alemán de Industria 4.0, y más concretamente: “sus cuatro componentes: integración vertical dentro de una factoría modernizada, integración horizontal con clientes y proveedores, ingeniería a lo largo de toda la red de valor, y personal específicamente preparado para dar respuesta a las nuevas necesidades”.
Entrando ya a definir las nuevas tecnologías que se aplicarán, destaca el “Internet de las cosas, la robótica colaborativa, la fabricación aditiva o impresión 3D, la realidad virtual y aumentada, el big data y la analítica de datos, el almacenamiento y la computación en la nube, la ciberseguridad, los vehículos no tripulados y la modelización y simulación extensiva”.
El crisol de dichas tecnologías debe dar como resultado “la “maqueta digital” como clave de bóveda del concepto que permitirá simular en espacios de trabajo virtuales el desarrollo de los nuevos productos y procesos incluyendo la contribución de las personas…”. Igualmente afirma que “será necesario desarrollar nuevas formas de relación entre la empresa, sus proveedores y sus clientes, el primero de todos, la Armada Española”.
En el terreno de los recursos humanos para llevar a cabo el proyecto, habla de: “la importancia que la educación tendrá en el desarrollo del Astillero 4.0 en particular y de la Industria 4.0 en general. Por ello, Navantia ha intensificado notablemente su relación con la universidad para contribuir a la mejora de la enseñanza,…especialmente….en procesos de construcción naval”. De dicho proceso colaborativo se ha dado ya el resultado de la creación de cátedras en las Escuelas de Ingeniería Naval, de Madrid y Cartagena que tendrán continuidad en Ferrol y Cádiz. Otro ejemplo notable que cita es “la Unidad Mixta de Investigación (UMI) creada con la Universidad de A Coruña en octubre de 2015, precisamente para el desarrollo de conceptos relativos a mejora de procesos, implantación de nuevas tecnologías asociadas a la cuarta revolución industrial e incorporación de tecnologías disruptivas, encaminados todos ellos al programa de las futuras fragatas F110”.
Destaca también el proyecto de modernización del Astillero de Ferrol “en el que se viene trabajando desde hace meses… Una de las líneas más representativas del proyecto es la correspondiente a los estudios de viabilidad de un dique seco que permita la construcción en horizontal de buques completos, incorporando talleres de especialidad anexos para minimizar las distancias y optimizar los flujos”.
La importancia de la apuesta por los citados desarrollo, son de vital importancia, hasta el punto de que serán decisivos para el futuro de la viabilidad del sector, así afirma “Desde el primer momento Navantia entendió que el Astillero 4.0 es el único camino posible para alcanzar la competitividad sostenible, …como única forma de alcanzar el éxito ante un reto de tanta envergadura en el que se juega el ser o no ser de la construcción naval española”. (Julio Maíz Sanz)
Fotografía: Astillero de Ferrol. Foto Navantia.
