El Ejército de Tierra español desde hace años quiere dotar con las capacidades que otorga la versión 3+ a su Mando de Artillería Antiaérea (MAAA). De hecho, lleva años estudiando la operación de modernización, a la espera de la financiación. De la mano de los expansivos presupuestos de defensa para 2023, el programa de Patriot de nueva generación se incluyó en el nuevo ciclo inversor, previendo que presente una primera partida de 145 millones de euros para el proyecto. Según la DSCA, el Gobierno solicitó la compra de esas 4 unidades de fuego modernizadas Patriot Configuration-3+ que constan de 51 misiles de la versión PAC (Patriot Advanced Capability) y 3 MSE (Missile Segment Enhanced), incluyendo 1 de pruebas (Fly-to-Buy Missile).
También incluiría el pedido 24 estaciones de lanzamiento M-903 Patriot; 4 sistemas de radar AN/MPQ-65; otras tantas estaciones de control para el enganche final del posible objetivo AN/MSQ-132; 2 centrales de coordinación de información ICC (Information Coordination Central); 8 grupos de mástiles de antena; 4 centrales de generación de electricidad para el uso del complejo sistema; y 4 unidades de energía. Se incluyen equipos de comunicaciones; herramientas y equipos de prueba; programas de telemetría; equipos y servicios de apoyo que comprenden diferentes kits como los de telemetría, generadores, publicaciones y documentación técnica; equipo de entrenamiento; repuestos; formación de personal, soporte y ensayos; asistencia técnica, ingeniería y apoyo logístico; Integración y verificación de sistemas SICO (Systems Integration and Checkout) y otros elementos.
Este sistema mejoraría muchísimo la capacidad en el campo de la defensa antimisiles de España, aumentará las de defensa del Ejército de Tierra y respaldará su objetivo de mejorar la defensa nacional y territorial y la interoperabilidad con las fuerzas de Estados Unidos y la OTAN, como es el caso de la batería de Patriot desplegada por el Mando de Artillería Antiaérea en Turquía. Los contratistas principales, a través del US Army, serán lRaytheon Corporation en Tewksbury (Massachusetts) y Lockheed Martin en Dallas (Texas). No se conocen acuerdos de compensación en relación con esta posible venta, cuya implementación requerirá que representantes del Gobierno y de los contratistas de Estados Unidos viajen a España durante un período prolongado para verificar el sistema y proporcionar capacitación y soporte técnico y logístico (Julio Maíz).